Estuvieron detenidos 69 días por violar la veda a diversas especies marinas

Excarcelan en penal de Campeche a los nueve pescadores yucatecos

Los recibieron en Celestún, donde sus vecinos retuvieron a tres marinos para lograr su libertad

LUIS BOFFIL CORRESPONSAL

Merida, Yuc., 1Ɔ de agosto. Después de pasar 69 días recluidos en el penal de Kobén, Campeche, por violar la veda a diversas especies marinas, volvieron a sus casas nueve pescadores de Celestún, municipio costero marginado.

Los excarcelados comentaron que la mayoría de ellos pensó que pasarían los siguientes años en prisión por delinquir al pescar para dar de comer a sus familias.

Sin embargo, a partir de negociaciones entre los gobiernos de Yucatán y Campeche, así como la sentencia del Tribunal Unitario del 14 Distrito del Poder Judicial de la Federación que anuló los cargos contra los pescadores yucatecos, éstos salieron de Kobén el miércoles a las 22:40 horas, y a bordo de camionetas del gobierno estatal llegaron a Celestún, cuyos pobladores retuvieron el pasado 15 de julio a tres efectivos navales para presionar por la exoneración de sus vecinos.

El gobernador Patricio Patrón Laviada, acompañado del secretario general de Gobierno, Pedro Rivas Gutiérrez, visitó Celestún alrededor de las 20:30 horas del miércoles para dar la bienvenida a los pescadores. Diversos pobladores, en su mayoría mujeres, le recriminaron que aparentemente faltaría a su promesa de liberar a los hombres de mar en un plazo que expiraría ese mismo día.

"Nos fallaste, Patricio, nos fallaste", le gritaron cuando descendió de su camioneta. Entonces Patrón Laviada aclaró que su presencia en Celestún obedecía a la inminente liberación de los pescadores; "no les fallé y tampoco los voy a engañar", dijo. Algunas personas lo vitorearon.

Entretanto, el alcalde celestunense, José Luis Peña Chac, dijo a periodistas: "mi integridad y la de mi familia están en juego", pues familiares de los reos le advirtieron dos semanas antes que él respondería si la promesa del gobierno no se cumplía.

Empero, al filo de la medianoche llegaron a la comunidad Jorge Ortiz Perera, Luis Arturo Yam Canul, José Melesio Santana Zetina, Angel Adrián Pérez Baas, Manuel Alfredo Moreno Caamal, Raúl Zacarías Chan Bacab, Jorge Elías Canché Baas, Lucio de la Cruz Mayo y Pastor May Yam. Los aplausos estallaron.

"Lo único que hicimos fue pescar para comer"

May Yam, de 77 años de edad, y el más joven de los liberados, Jorge Ortiz Perera, de 29, narraron sus experiencias en el penal campechano de San Francisco de Kobén.

El veterano pescador afirmó: "por momentos no dudé que terminaría mis días en la cárcel. Casi tres meses fueron espantosos. Aun a mi edad, ya no soportaba".

Añadió: "en el penal nadie te puede tratar bien, a menos que tengas dinero. Nosotros, Ƒde dónde? Lo único que hicimos, el pecado que cometimos, fue pescar para comer".

Ortiz Perera, en compañía de su esposa Carmen del Rosario Valdano, y su hija del mismo nombre, indicó que su mayor preocupación durante el encierro fue la manuntención de su familia, a la cual apoyó el ayuntamiento de Celestún. "Ahora hay que recuperar el tiempo perdido, vamos a trabajar muy duro para ganar dinero y pagar las deudas que tenemos", señaló.

Al menos para May Yam y Ortiz Perera el tiempo es oro. Descansarán el fin de semana y luego retornarán al mar, pues "hay mucho pulpo qué pescar".

Por el momento, explicó el alcalde Peña Chac, los pescadores de Celestún, Yucatán, y de Isla Arena, Campeche, trabajarán la captura del pulpo sin invadir áreas marítimas de cada entidad.

A su vez, el gobernador Patricio Patrón pidió a la población un año para solucionar el conflicto pesquero entre ambas comunidades.

Al final, casi a las dos de la madrugada de este jueves, el edil de Celestún se retiró a su casa. Su integridad quedó a salvo.