Justifica Shimon Peres los ataques de Tel Aviv en los territorios palestinos
Comenzó la represalia de Israel; invade Rafah
Hamas amenaza con eliminar a "cien israelíes" por cada uno de sus dirigentes asesinados
AFP, DPA Y REUTERS
Washington, 1Ɔ de agosto. El canciller israelí, Shimon Peres, justificó hoy las operaciones militares en los territorios palestinos al afirmar que "no se puede luchar contra alguien que va a cometer un atentado suicida cuando ya se encuentra en camino", mientras se espera una nueva escalada de violencia en momentos en que Israel prepara su represalia al atentado de ayer en la Universidad Hebrea de Jerusalén, que dejó siete muertos, entre ellos cinco estadunidenses.
A todo esto, el ejército israelí mató a un palestino e hirió a otro durante una incursión con tanques y excavadoras en Rafah, en tanto que una niña palestina de seis años murió por disparos de los soldados cerca del asentamiento judío de Nitzer Hazani, en el sur de la franja de Gaza, y el cuerpo de un israelí, muerto por disparos de bala, fue hallado cerca de Tulkarem, en Cisjordania.
Militares israelíes destruyeron hoy dos casas en Cisjordania, entre ellas la de un kamikaze palestino en Beit Jala, cerca de Belén. También destruyeron la casa en la que vive un activista de Jihad islámica detenido la semana pasada en Jenin.
Asimismo, el comandante del ejército de Israel en Cisjordania firmó la orden de deportación de dos miembros de la familia de los palestinos involucrados en el ataque del 16 de julio contra un autobús cerca del asentamiento judío de Emmanuel.
Estas deportaciones ya habían sido aprobadas por el asesor legal del gobierno, Eliakim Rubinstein. Los dos palestinos afectados tienen 12 horas para apelar de la orden de deportación ante un comité especial.
Previamente, el secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, instó a Tel Aviv a respetar la Convención de Ginebra sobre la protección a civiles en conflictos y a no deportar a los miembros de las familias de atacantes suicidas palestinos.
A su vez, un juez militar israelí falló el jueves que un camarógrafo de la agencia británica Reuters deberá permanecer encarcelado otros tres meses por ser sospechoso de colaborar con un grupo armado, pero no citó evidencias ni presentó pruebas, al igual que un fotógrafo palestino de Afp.
Ayer el gabinete de seguridad israelí adoptó un plan de lucha para impedir los atentados suicidas, que incluye la expulsión de los familiares de autores de estos ataques, así como expropiaciones y demoliciones de viviendas de parientes de militantes.
Pero Hamas, el grupo islámico responsable del atentado contra los estudiantes de la Universidad Hebrea, afirmó que no será disuadido de continuar sus ataques por esas medidas, y su brazo armado amenazó con matar a "cien israelíes por cada uno" de sus dirigentes asesinados por Israel.
Hamas dijo que el atentado contra los estudiantes era su respuesta al bombardeo en Gaza la semana pasada, que mató a su líder militar, pero también a 17 civiles.
En Washington, el ministro Peres consideró hoy que "el único lugar en el que se puede prevenir la catástrofe es en su origen, allí donde los responsables de los atentados suicidas son entrenados y reclutados, y es por eso que ingresamos a esas ciudades".
El canciller se entrevistó con el presidente George W. Bush, quien previamente ha-bía dicho que estaba "furioso" por la muerte de cinco estadunidenses en el atentado del miércoles en la universidad hebrea.
"Me enfurece la pérdida de vidas inocentes. Sin embargo, a pesar de mi furia y mi enojo, todavía creo que la paz es posible", dijo Bush a la prensa antes de una reunión con el rey Abdullah de Jordania.
Las declaraciones de Bush fueron precedidas por una dura crítica del embajador de Estados Unidos en Israel, Daniel Kurtzer, quien condenó el ataque al decir que los "asesinos terroristas" palestinos habían tocado "un nuevo fondo de depravación".