martes 30 de julio de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
n 10 plantas de tratamiento, abandonadas: Comisión Estatal de Agua y Saneamiento de Puebla
El índice nacional de saneamiento de agua, 21 por ciento; en Puebla, de sólo 7 por ciento

Mónica Azcárate n

Antes de finalizar el sexenio, la intención del gobierno estatal es aumentar el número de plantas tratadoras de aguas residuales para mejorar los estándares de saneamiento, cuyo índice en el interior del estado es de 7 por ciento anual. Sin embargo, de las 28 tratadoras que existen, al menos 10 operan de forma irregular o están abandonadas, ya que los municipios carecen de recursos para solventar los costos de operación, que en algunos casos rebasan los 30 y 40 mil pesos mensuales.
Además de lo costoso que resulta operarlas, sobre todo en municipios grandes, donde los volúmenes de aguas negras son altos, la falta de continuidad en su operación no está garantizada ante la renovación de ayuntamientos cada tres años. Ello, aunado a que la recaudación por concepto de agua potable es mínima, debido a que la mayor parte de la población se niega a pagar el servicio, contribuye a que los ayuntamientos carezcan de recursos para solventar los gastos de operación de este tipo de infraestructura, y en consecuencia las abandonen.
De hecho, un gran porcentaje de los municipios que cuentan con sus propias plantas tratadoras desvía recursos del ramo 33 -fondos que deben invertirse en obras de beneficio social- al pago de la energía eléctrica, reactivos y de salarios del personal que las opera, según informó la Comisión Estatal de Agua y Saneamiento de Puebla (Ceaspue).
No obstante lo anterior, la pretensión del gobierno de Melquiades Morales Flores es construir, por lo menos, 16 plantas más antes de concluir el sexenio en diversos municipios, con el fin de incrementar los niveles de saneamiento, cuya cifra nacional es de 21.5 por ciento. Si bien el estado de Puebla reporta un índice de 35 por ciento, porcentaje que lo colocaría arriba de la media nacional, la cifra es engañosa, ya que incluye a la capital de estado, misma que cuenta ya con cinco plantas de tratamiento. Sin embargo, el índice de saneamiento en el interior de la entidad -descontando la Angelópolis- es de sólo 7 por ciento.
En la actualidad, dicha dependencia tiene registradas 28 plantas de tratamiento en el interior del estado -sin contar las cinco que operan en la capital-, mientras que la Secretaría de Desarrollo Urbano, Ecología y Obras Públicas del Estado de Puebla (Sedurbecop) reportó que en los últimos dos años se construyó otras 13, de las cuales tres ya están funcionando y el resto está por concluirse.
Sin embargo, de las 28 que reporta la Ceaspue, al menos 10 operan irregularmente o están abandonadas. El pasado miércoles 18 de julio, al término de una gira gubernamental por Atempan, Francisco Palomino, coordinador técnico de dicha comisión, aseguró que siete plantas tratadoras de agua permanecen sin ser usadas por los motivos antes señalados; entre éstas citó las que están ubicadas en Acatlán de Osorio, Tecamachalco, Tepeaca y Huejotzingo.
Entrevistado vía telefónica, el director de Estudios y Proyectos de la dependencia, Alberto Vargas Hidalgo, fue más allá y aseguró que "casi todas están sin operar"; pero al día siguiente, cuando se le entrevistó personalmente, corrigió el dato y dijo que sólo una, la de Acatlán de Osorio, está "totalmente abandonada", y que la tratadora de Huejotzingo sólo reportó problemas por el calentamiento de sus motores, "por lo que a veces su uso es interrumpido".
Sin embargo, más adelante, el funcionario admitió que "extraoficialmente" se sabe que las nueve plantas que utilizan el sistema de lodos activados -cuyo costo de funcionamiento fluctúa entre los 15 y 20 mil pesos- trabajan irregularmente, ya que las autoridades municipales optan por apagarlas varios días para ahorrar energía eléctrica, lo que resta efectividad en el tratamiento de las aguas negras e impide que éstas salgan totalmente limpias. Las tratadoras que utilizan dicho sistema, además de la de Acatlán de Osorio, están ubicadas en los municipios de Tepeaca, Atoyatempan, Tepeyahualco de Cuauhtémoc, Tlahuapan, San Nicolás Buenos Aires, Tlatlauquitepec, Vicente Guerrero y Tecamachalco.
Interrogado sobre los efectos de que las aguas negras no sean saneadas totalmente en estos municipios, debido a que su funcionamiento es interrumpido, Vargas Hidalgo, sostuvo que "el hecho no es muy grave si se considera que los desechos generados por estas localidades son de tipo doméstico y se caracterizan por su baja concentración de contaminantes, lo que no ocurre con las producidas en zonas urbanas. Además, están libres de tóxicos industriales", agregó.

Los costos de operación

El costo de operación de las tratadoras de aguas negras depende del tipo de sistema mediante el cual funcione, por lo que varía de 4 mil pesos hasta 30 y 40 mil pesos. Los sistemas de depuración que utilizan las 28 reportadas por la Ceaspue son tres principalmente: sistema de laguna de estabilización, filtros biológicos o de percolación sintética y lodos activados con aeración extendida.
En el primer sistema, las aguas residuales son depositadas en un estanque donde reposan de 20 a 30 días para que la natulareza actúe y las depure. Su costo de operación mensual es bajo y asciende a 4 mil pesos, incluye el salario de dos operadores y compra de cloro. En el estado hay 16 plantas que emplean este sistema, están en Ciudad Serdán, Tlapanalá, Chilchotla, Palmar de Bravo, Tehuacán, Tehuitzingo, Tianguismanalco, Tlahuapan, Teopantlán, Tilapa, Lafragua, Chichiquila, Tepeyahualco y San Pedro Yeloixtlahuacan. En la actualidad todas operan.
El costo de operación mensual de las plantas con sistema de filtros biológicos o de percolación sintética fluctúa entre los 12 y 15 mil pesos, aunque en algunos casos puede aumentar hasta 30 o 40 mil pesos, como es el caso de municipios con mayor densidad poblacional, como San Martín Texmelucan y Huejotzingo.
"El caso de Texmelucan es un ejemplo del adecuado manejo del sistema de extracción, suministro y saneamiento del agua, en el interior del estado, ya que el sistema operador de este municipio cuenta con altos niveles de recaudación por el pago del líquido, lo que le permite cubrir los costos de operación de su planta de forma permanente, sostuvo el director de Estudios y Proyectos de la Ceaspue, Alberto Vargas.
Por su parte, la Secretaría de Desarrollo Urbano, Ecología y Obras Públicas del Estado de Puebla (Sedurbecop) reportó que en los dos últimos años construyó 13 tratadoras de aguas negras en el interior del estado, de las cuales sólo tres funcionan y el resto está por concluirse. Fabián Juárez Juárez, jefe de sección de Estudios y Proyectos de la Subsecretaría de Ecología de la dependencia, informó que las ubicadas en los municipios de Piaxtla, Quecholac y Mazaltiltepec ya están operando. Las demás están situadas en Palmar de Bravo, Hueyapan, Libres, Xochiltepec, Toltepec, Epatlán, Piaxtla y Cuautinchan, entre otros.
El abandono de las plantas tratadoras de aguas residuales no es un fenómeno exclusivo del estado de Puebla; es un problema que se repite en todo el país y el resto de América Latina, debido a que la mayor parte de la población en esta zona del continente se niega a pagar el servicio del agua potable, además de que la cultura de saneamiento aún es incipiente.
Por ello, la Sedeurbecop y la Ceaspue estudian diversos mecanismos para lograr que los municipios se vean obligados a pagar el funcionamiento de las plantas, mediante la firma de convenios a fin de que los alcaldes se comprometan a mantenerlas en operación; también prevén modificaciones técnicas en la infraestructura para bajar costos, además de que gestionarán ante la comisión Federal de Electricidad (CFE) cuotas agroindustriales para abaratar el consumo de energía eléctrica, toda vez que actualmente los ayuntamientos pagan tarifas muy altas, según informaron ambas dependencias.
El subsecretario de Ecología de la Sedurbecop, Juan Carlos Fernández, manifestó que la dependencia ya signó los primeros convenios de colaboración con diversos ayuntamientos, para que por medio de una acta de cabildo se responsabilicen del pago de su funcionamiento de forma permanente.
Así también, las autoridades iniciarán campañas para "concienciar" a los habitantes, con el fin de que paguen el suministro del líquido; además, se dará preferencia, para la construcción de nuevas plantas en aquellos municipios que ya posean sistemas operadores, con el propósito de aprovechar su infraestructura y garantizar la continuidad en la operación de las tratadoras.
De hecho, las 16 nuevas tratadoras que edificará el gobierno del estado antes de finalizar el sexenio estarán en Chignahuapan, Zacatlán, Huauchinango, Xicotepec de Juárez -la Federación ya envió recursos para diseñar los proyectos de obra en estos municipios-, Tlatlauquitepec, Teziutlán, Zacapoaxtla, Guadalupe Victoria, Tlachichuca, Acatzingo, Atlixco, Izúcar de Matamoros, San Salvador Huixcolotla, Cuautlancingo e Ixcaquixtla, informó la Ceaspue.