AGENDA
EX JEFE DEL FMI RESPONSABILIZA AL FONDO DE LA CRISIS ARGENTINA
WASHINGTON, 16 DE JULIO. Michael Mussa, ex jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI), describió este martes el colapso financiero de Argentina en 2001 como "uno de los fracasos más trágicos" en la historia del instituto multilateral, que según él tuvo mucha responsabilidad en lo sucedido. Mussa señaló que, a diferencia de Rusia o las economías asiáticas que requirieron auxilio del FMI tras haber entrado en crisis, Argentina se derrumbó y cayó en cese de pagos a pesar de haber estado permanentemente bajo programas y supervisión del FMI desde principios de la década de los 90. "Argentina estuvo bajo el escrutinio del FMI todo el tiempo. Aunque las decisiones claves en materia fiscal, monetaria y tasa de cambios fueron tomadas por las autoridades argentinas y disfrutaban de amplio apoyo, el FMI apoyó y alabó esas políticas y por lo tanto tiene mucha responsabilidad por su trágico fracaso", dijo Mussa, economista jefe del FMI de 1991 a 2001, quien presentó hoy su análisis del caso argentino en un folleto de 90 páginas publicado por el Institute for International Economics (IIE), donde actualmente es investigador principal. En el informe Argentina y el Fondo, del triunfo a la tragedia, Mussa sostiene que uno de los fallos graves del FMI fue no haber presionado con más vigor en favor de una política fiscal sostenible cuando la economía estaba creciendo, entre 1993 y 1998. Otro error, que Mussa caracterizó como el más grave de los ocurridos durante su estadía en el FMI, fue haberle desembolsado a Argentina 5 mil millones de dólares adicionales en agosto de 2001, cuando en su opinión ya era evidente que no podría evitar caer en cese de pagos ni mantener la paridad cambiaria con el dólar.
AFP
RENUEVAN SUSPENSION DE CAPITULO III DE LA HELMS-BURTON
WASHINGTON. El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, anunció este martes al Congreso la suspensión por otros seis meses del título III de la Ley Helms-Burton, que autoriza a ciudadanos estadunidenses a demandar ante sus tribunales a firmas extranjeras que estén "traficando" con propiedades que les hayan sido expropiadas en la isla. En una carta dirigida al Congreso, Bush justificó la suspensión invocando el interés nacional de Estados Unidos y que con ello contribuirá a acelerar una transición hacia la democracia en Cuba, en una decisión que no provocó sorpresa alguna.
AFP