Necesario, crear clínicas para su tratamiento: Encinas
Con problemas de adicción a drogas, más de 7 mil internos en reclusorios
ANGEL BOLAÑOS, RAUL LLANOS Y GABRIELA ROMERO
El subsecretario de Gobierno del Distrito Federal, Alejandro Encinas Rodríguez, informó que un censo realizado en los reclusorios y la penitenciaría de la ciudad reveló que 5 mil de los más de 22 mil 700 presos tienen problemas de adicción a algún tipo de droga.
Estimaciones de las autoridades penitenciarias agregan a esa cifra entre 10 y 15 por ciento más de adictos, con lo que la población recluida con problemas de adicción se calcula entre 7 mil 200 y 7 mil 500.
La mejor forma de enfrentar el problema, señaló el funcionario, no es sólo combatiendo el tráfico de drogas, sino además instalar clínicas contra adicciones que permitan realmente la rehabilitación y el tratamiento de los presos. "Tenemos que combatir las adicciones como una enfermedad, requieren tratamiento médico", señaló Encinas Rodríguez.
El funcionario negó que con el argumento de evitar el amotinamiento de los presos se tolere la introducción de drogas a los centros de reclusión, aunque admitió que hay problemas de corrupción en los diferentes niveles de mando, que permiten el tráfico de estupefacientes. No obstante, dijo, se realizan acciones para detectar y combatir la corrupción, y se utilizarán nuevas tecnologías que harán más difícil que las visitas de los internos y el mismo personal de reclusorios puedan introducir drogas.
Depuración
Ayer, en el foro Retos y soluciones para el sistema penitenciario del nuevo siglo, organizado por la Asamblea Legislativa, el director del Reclusorio Norte, Fernando Villanueva Alonso, afirmó que durante muchos años los reclusorios de esta capital constituyeron para muchos "la caja chica o la isla del pirata", donde podían obtenerse miles de pesos, situación que ahora cambia paulatinamente.
El funcionario comentó que es fundamental terminar con las anomalías que durante muchos gobierno imperó en esos centros de reclusión, pero para ello también es necesario destinar mayor inversión para atenuar la sobrepoblación y el hacinamiento, que dan paso a actos de corrupción.
Para Villanueva, "es tiempo de desmitificar las cárceles, pero para ello hay que meter las manos en la compleja situación que ahí se advierte, pero hacerlo en serio y no sólo a través de declaraciones". Precisó que la situación es tal que a diario reciben de 30 a 50 presuntos responsables de un delito, de los cuales sólo se quedan 10.
En este mismo contexto, Raúl González Salas Campos, académico universitario, manifestó que en nuestra sociedad "la pena, la cárcel, es necesaria, pero invirtamos en ese sector, que sea un presupuesto para acciones de largo plazo, de manera que se logre concretar la readaptación, porque si se tiene sólo la idea de invertir a corto plazo, es dinero perdido".
Mientras, Enoé Uranga, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa del DF, comentó que en el tema penitenciario falta hacer el gran proyecto de reforma; no obstante, dijo que ya hubo algunos avances con la reciente aprobación del Código Penal del Distrito Federal.
A su vez, el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, Juan Luis González Alcántara Carrancá, resaltó la labor de los legisladores en cuanto a las modificaciones al Código de Procedimientos Penales.
"Con buenas leyes y mejores servidores públicos podremos solucionar el problema", dijo el magistrado, quien en su oportunidad manifestó que la salvaguarda de los derechos de los internos en los centros penitenciarios es imprescindible en un Estado moderno.