Frenarla o modificarla sería venganza política, aseguran durante un foro sobre el tema
Advierten diputados del PRD que no aceptarán modificaciones a la reforma política de la capital
El PRI es un estorbo para el avance democrático del Distrito Federal, dice Martí Batres
CIRO PEREZ SILVA
Diputados locales y federales del PRD denunciaron el bloqueo que realiza el PRI en la Cámara de Senadores para que no se apruebe la reforma política del Distrito Federal. "Bloquear o cambiar la propuesta consensuada por todos los partidos", afirmaron, "sería un acto de venganza política por parte de ese partido y un retroceso para la democracia."
En el encuentro sobre la reforma política del DF que organizó ayer el PRD en la Cámara de Diputados, Martí Batres Guadarrama acusó al PRI de ser un estorbo para el avance democrático del Distrito Federal y advirtió que no "aceptarán que les den gato por liebre" en esta reforma.
Agregó que con esa propuesta de reforma se le otorgarían atribuciones y facultades a la Asamblea Legislativa para legislar, por ejemplo, el manejo autónomo del presupuesto del Gobierno del Distrito Federal, el endeudamiento de la ciudad y la política de seguridad pública, que hasta ahora es una facultad federal, igual que el manejo de la educación.
Víctor Hugo Círigo Vázquez, presidente del PRD en el DF, señaló al senador priísta David Jiménez de bloquear "de manera irracional" la reforma, dado que fue él quien anunció que se modificaría la minuta original de la propuesta, pero sin explicar cuáles serían esas modificaciones.
Tras explicar que el objetivo principal de esa reforma es otorgar derechos plenos a los habitantes del DF, "a fin de que dejen de ser ciudadanos de segunda", urgió al Senado de la República a destrabar la reforma política del Distrito Federal para que se incluya en el próximo periodo extraordinario de sesiones.
Alejandro Sánchez Camacho, coordinador del PRD en la ALDF, demandó a su vez al Senado que destrabe la reforma, ya que "los tiempos nos rebasan"; advirtió que no darán un paso atrás en los puntos acordados por todos los partidos en esta materia.
"El PRD no quiere una reforma mutilada. No daremos un paso atrás y, de ser el caso, convocaremos a los ciudadanos, organizaciones sociales, diputados locales y federales para evitar que el PRI en el Senado siga secuestrando los derechos de los habitantes del DF", sentenció.
Los legisladores perredistas emplazaron al PRI para que honre la palabra que dio durante la aprobación de la minuta de reforma, en el sentido de que ya es un derecho de los ciudadanos y un asunto de justicia social, y cambie el doble discurso por una actitud de sensibilidad y madurez política.