Excluir a la rama editorial de la tasa cero, acción incongruente, dice el diputado Castro
Fox anuncia un país de lectores, pero se castiga a los autores y los editores
Descartan legisladores que el Congreso pueda actuar en lo inmediato para revertir esa medida
En ese tema fiscal es más viable esperar una acción del Poder Ejecutivo Federal
RENATO RAVELO
El principal programa cultural del gobierno de Vicente Fox, Hacia un país de lectores, es incongruente con la eliminación de la tasa cero a la industria editorial, opinó el diputado Florentino Castro, integrante de la Comisión de Cultura, durante una reunión en la que descartó que el Poder Legislativo pueda hacer algo en lo inmediato para revertir la medida: ''La tradición es que nunca se ha incluido un tema hacendario en el periodo extraordinario de sesiones. En ese tema es más fácil esperar una acción del Poder Ejecutivo".
Por su parte, Alejandro Sandoval, de la Asamblea para la Cultura y la Democracia (ACD), señaló durante el acto en el que se dieron a conocer los ocho asuntos pendientes en materia legislativa, que ''este gobierno quiere ir hacia un país de lectores, pero sin autores ni editores", en referencia a la eliminación de la exención fiscal a las regalías autorales en la actual Ley del Impuesto Sobre la Renta.
Los integrantes de esa asociación civil se manifestaron ''preocupados por la actual falta de un proyecto de nación que defina con claridad, entre otros rubros, la política cultural del país".
Falta de coherencia
En la mesa, Sandoval estuvo acompañado por Jorge Pantoja, Román Revueltas y Luis Adolfo Gálvez. Los dos primeros son integrantes y fundadores de la ACD, y Gálvez, asesor sindical.
Entre los deberes legislativos, destacaron, se encuentra el ''tratamiento fiscal específico para creadores de arte, intérpretes y ejecutantes".
La semana anterior comenzó con el anuncio del programa para la lectura, en el que se destacó la creación de la megabiblioteca, así como el apoyo del empresario estadunidense Bill Gates con un donativo de 30 millones de dólares para el equipamiento de mil 200 bibliotecas públicas.
No había terminado la semana cuando en el Diario Oficial se excluyó a la industria editorial de las actividades que por su prioridad en el desarrollo del país reciben el estímulo de la tasa cero.
Para el diputado Castro, así como se dieron apoyos fiscales a la industria de la fructosa o a otras ramas, se tendría que haber mantenido el apoyo a la rama editorial, pues fue el propio presidente Vicente Fox quien destacó que en su gobierno se apoyaría ''como nunca" la promoción de la lectura: ''Ya deberíamos acostumbrarnos a esa falta de coherencia", enfatizó el legislador.
Los pendientes
Sandoval ironizó con la meta del programa gubernamental: ''Es claro que quieren dar un impulso sin precedente a la lectura: van a comprarse muchas computadoras, quieren ir hacia un país de lectores, pero sin creadores ni editores".
El acto que terminó atendiendo la polémica del momento fue convocado por la Asamblea para la Cultura y la Democracia para dar a conocer su análisis sobre las plataformas y propuestas culturales de los partidos políticos, así como los ocho asuntos que debieran ser abordados por el Legislativo.
En el mismo, en medio de rumores sobre la llegada de una comisión de editores con diputados -desmentida en la Cámara Nacional de la Industria Editorial-, se presentaron integrantes de la Asociación Nacional de Intérpretes (Andi), encabezados por su anterior dirigente Lilia Aragón, para entregar una carta a los líderes de las tres principales fuerzas políticas y a la presidenta de la Mesa Directiva.
En la misiva suscrita por Aragón, con 25 firmas de apoyo, se pide a Beatriz Paredes Rangel, Rafael Rodríguez Barrera, Felipe Calderón Hinojosa y Martí Batres Guadarrama, que incluyan el tema de la reforma fiscal en la agenda legislativa del periodo extraordinario.
Firman Carmen Salinas, Héctor Bonilla, Ofelia Guilmáin, Tania Libertad, Adriana Roel, Patricia Reyes Spíndola, Martha Verduzco y Maribel Guardia, entre otros.
Para los integrantes de la ACD están pendientes el marco jurídico del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), que se mantenga la rectoría del Estado en asuntos como la defensa patrimonial y lograr un programa de bienestar social para creadores.
Asimismo, para esta asociación civil se debe conocer y proteger el patrimonio cultural de Banamex, para que no salga del país; garantizar desde el ámbito constitucional el acceso de la población a los bienes y servicios culturales, promover una ley federal de cultura y practicar una auditoría al Sistema de Administración Tributaria respecto del programa fiscal de Pago en especie.