Sólo busca prolongar su gestión sindical, aseguran

Acusan a líder del Metro de retrasar negociación salarial

Disidentes señalan que antepone sus intereses personales

LAURA GOMEZ FLORES

Con la intención de prolongar su gestión al frente del Sindicato Metropolitano del Sistema de Transporte Colectivo-Metro hasta marzo del próximo año, Fernando Espino Arévalo ha postergado la firma de su pliego petitorio por más de tres meses, pese a que las autoridades del organismo le han manifestado que "es imposible ofrecerles más de 8 por ciento de incremento salarial, que fue el tope para los trabajadores del gobierno capitalino".

Fuentes oficiales explicaron que, de esta manera "el también diputado local cuenta con materia de trabajo para argumentar ante la Junta de Conciliación y Arbitraje la conveniencia de continuar en el cargo para alcanzar mejoras en el salario y prestaciones en beneficio de los 12 mil 500 sindicalizados, cuando el único propósito de prorrogar la firma del convenio y amenazar con paros es personal".

Los cambios en los estatutos del organismo sindical, realizados en su pasada asamblea, permiten esta situación, lo cual ha generado divisiones entre sus representados y molestias entre los miembros de las tres corrientes disidentes, que "consideran urgente acabar con la época del charrismo y los beneficios a un pequeño grupo de incondicionales, en detrimento de las mayorías", señalaron.

El Sindicato Unico de Trabajadores Democráticos (Sutrad-STC), encabezado por María del Carmen Servín, explicó que el 19 de marzo concluyó la vigencia de sus condiciones generales de trabajo, y hasta la fecha "no sabemos qué ha pasado con nuestro incremento salarial y demás prestaciones, por culpa de (Fernando) Espino y los metropolitanos, que han obstaculizado la negociación al anteponer sus intereses personales".

Un ejemplo de esta situación es "su testarudez de obligar a las autoridades del Metro a recontratar a los técnicos de confianza, que fueron inhabilitados por la Contraloría al detectar manejos turbios, y solicitar la exclusión de la prestación que corresponde al fondo de ahorros de los integrantes del Sutrad. Lo anterior no se pudo lograr porque está fuera de toda legalidad, y su obligación es velar por mejores condiciones laborales de su gente", indicó.

Las negociaciones entre autoridades y sindicato se reanudaron ayer, con miras a alcanzar un acuerdo esta semana, el cual viene aplazándose desde abril pasado, en torno a un aumento salarial de 8 por ciento y mejora en sus prestaciones, con base en los recursos del organismo, que para servicios personales este año canalizará 2 mil 758.8 millones de pesos, equivalentes a más de la mitad de los fondos destinados a gasto corriente.

Las fuentes consultadas confiaron en que, más allá de sus pretensiones personales, Espino Arévalo debe entender que "difícilmente obtendrá un incremento de 20 por ciento retroactivo al primero de enero, mil pesos mensuales de vales de despensa, mil pesos de ayuda para renta, fijar en uno por ciento de la nómina actual la ayuda para compra de útiles escolares y aumentar en 100 por ciento el pago de lunch".

Además, indicaron, exige "un aumento de la prima vacacional, dependiendo de la antigüedad del trabajador, de entre 22 y 37 días; un bono de 3 mil pesos por el Día del Trabajador del Metro; 30 días por año de prima de antigüedad para quienes se jubilen; que se paguen tres días de salario más cada 28 días por cumplir con los índices de productividad establecidos; 12 días económicos, y que el horario de servicio los días 24 y 31 de diciembre concluya a las 23 horas".