Difiere de aseveraciones de los titulares de SSP y Reclusorios

Insta López Obrador a atender origen social de la criminalidad

La delincuencia no se restringe a un asunto de cárceles y policías, dice

ELIA BALTAZAR

Frente a la propuesta del secretario de Seguridad Pública, Marcelo Ebrard, de aplicar cadena perpetua a quienes incurran en delitos graves, el jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, manifestó sus reservas y sólo ofreció: "Vamos a ver en qué sentido hizo este planteamiento para no precipitarnos".

El jefe de Gobierno también abrió distancia frente a las afirmaciones del director general de Reclusorios, Héctor Cárdenas San Martín, quien aseguró que en las cárceles del Distrito Federal habrá 40 mil internos en 2006 si se mantienen los índices de delincuencia en la ciudad.

"Esto no es así", advirtió el jefe de Gobierno, cuya posición frente al tema de la delincuencia y la reclusión en las cárceles va más allá y se dirige hacia la necesidad de atender las causas sociales.

Así lo ha advertido López Obrador en diferentes ocasiones y ayer mismo insistió en que para el gobierno capitalino la delincuencia no se restringe sólo a un problema entre policías y ladrones, pues hay razones económicas que inciden en las condiciones de inseguridad. "Porque no todo lo podemos resolver con policías y cárceles", aseguró.

No se trata, dijo, de atender nada más los efectos, sino de poner en marcha diversos programas sociales que atiendan a la población, especialmente a los jóvenes, para quienes el gobierno capitalino presentará próximamente un proyecto en particular.

"No estamos aplicando sólo una visión policiaca para tener más policías, más cárceles, leyes más severas. No es así. Se trata de atender el fondo para prevenir el problema."

López Obrador insistió en la necesidad de atender particularmente a los jóvenes, quienes de manera más recurrente delinquen. Pero hay razones, advirtió, pues se calcula que 85 por ciento de los jóvenes que se hallan en los reclusorios enfrenta condiciones de desintegración familiar.

"Hablamos -dijo- de jóvenes de entre 16 y 22 años, muchos de los cuales se encuentran en las cárceles capitalinas. Y eso tiene que ver con la descomposición social."

Según el jefe de Gobierno, a partir de los estudios que llevó a cabo su administración para advertir las zonas de donde proviene la mayoría de los jóvenes que se encuentran en los reclusorios, se reveló que 20 o 30 colonias concentran la más alta incidencia delictiva juvenil.

"Lo que hacemos -dijo- es un trabajo a fondo que no da resultados a corto plazo, pero será muy eficaz en el mediano y largo plazos." De modo, agregó, que no se trata sólo de cómo enfrentar la delincuencia, pues es un problema más complejo que se relaciona también con la situación económica nacional y las crisis recurrentes.

El jefe de Gobierno, sin embargo, admitió que no es fácil la situación que enfrentan los reclusorios en la ciudad, particularmente por el problema de hacinamiento, pues cuando se desborda la población interna no hay programa que pueda ser viable.

"Hay actualmente 22 mil 600 internos, cuando los reclusorios tienen capacidad para alojar a 14 mil", informó.

No obstante, aseguró que su administración ya ha tomado cartas en el asunto, al poner en marcha diversas acciones para atemperar el hacinamiento. Y destacó especialmente el acuerdo firmado con el gobierno federal para que los 3 mil 500 internos del fuero federal estén bajo su responsabilidad y se haga cargo de la administración de la cárcel de Santa Martha Acatitla.

Además, agregó, se están ampliando los reclusorios y se sigue con la política de preliberaciones de acuerdo con la ley en la materia.

Estas acciones, dijo, "nos permiten tener en los reclusorios una situación de control... hasta donde se puede".