Determina tribunal colegiado en materia penal ante cargos de nexos con narcotraficantes

Quirós Hermosillo y Acosta Chaparro serán juzgados por la procuraduría militar

La decisión favorece a los generales, aseguran fuentes cercanas a la defensa

JESUS ARANDA

El noveno tribunal colegiado en materia penal resolvió que los generales Humberto Quirós Hermosillo y Mario Arturo Acosta Chaparro, acusados de tener vínculos con el narcotráfico, sean juzgado por el fuero militar. Quirós también obtuvo un amparo en contra del auto de formal prisión que le fue dictado por el delito de operación de recursos de procedencia ilícita, esto en lo que respecta al ámbito de la justicia federal.

Cabe señalar que la decisión del tribunal tiene lugar después de que la justicia castrense se había declarado incompetente para conocer su caso, con el argumento de que los presuntos delitos que se les imputan -contra la salud en su modalidad de colaboración al fomento del tráfico de narcóticos, asociación delictuosa y cohecho (este último sólo se le imputa a Quirós)-, por los cuales fueron consignados en agosto del año 2000 ante el juez segundo militar, se cometieron "fuera de los actos de servicio".

Una vez resuelta esta polémica, inicialmente el Supremo Tribunal Militar resolvió enviar el asunto al juez 14 de distrito en materia penal, José Martínez Hidalgo, quien se excusó de seguir el proceso y por ello se mandó el asunto a un Tribunal Colegiado, la justicia castrense retomó el proceso correspondiente y citó a las partes para que presenten en los próximos días sus "conclusiones absolutas"; posteriormente se citará a audiencia final del juicio para concluir en un consejo de guerra.

Aunque precavidos en sus predicciones, fuentes cercanas a la defensa del general Quirós señalaron que la decisión del tribunal favorece a su cliente, porque la procuraduría castrense ya había reconocido que el asunto no era de su competencia.

En marzo pasado, el Supremo Tribunal Militar declinó la competencia del fuero de guerra para juzgar a ambos generales por los delitos referidos. Cabe señalar que si bien la Procuraduría General de Justicia Militar ordenó la detención de ambos en agosto de 2000 y posteriormente consignó la averiguación previa ante el juez segundo militar, en el transcurso del proceso determinó que los delitos cometidos tuvieron lugar "fuera de servicio", lo que se confirma por el hecho de que ningún otro militar bajo sus órdenes fue acusado por colaborar o recibir órdenes de los generales.

Sin embargo, el juez militar rechazó sus argumentos, lo que motivó la intervención del Supremo Tribunal Militar, el cual resolvió a favor de la procuraduría castrense, que encabeza el general Antonio López Portillo, y ordenó remitir el expediente a un juez federal para la consignación de los generales, aun cuando ambos generales servían al instituto armado. Ante la negativa del juez federal de aceptar la competencia, envió el expediente a la Suprema Corte para que ésta determinara, pero ésta, a su vez, mandó el asunto al noveno tribunal colegiado que resolvió en definitiva la controversia.

Según las averiguaciones de la procuraduría castrense, Quirós Hermosillo obtuvo beneficios del narcotráfico, provenientes del cártel que encabezaba Amado Carrillo, El señor de los cielos, recibió -como lo estableció la procuraduría militar-, una camioneta blindada, un auto Mercedes Benz y joyas. Lo que permitió configurar en su contra el delito de cohecho.