Bares y restaurantes aprovecharon la extensión de horarios

La madrugada no fue obstáculo para festejar en el Angel el triunfo de México

SUSANA GONZALEZ G.

Con el primer partido de la selección mexicana en el Mundial de Futbol, la Zona Rosa, San Angel y las colonias Roma y Condesa revivieron parcialmente durante la madrugada como no había sucedido desde el incendio de la discoteca Lobohombo, en octubre de 2000. Todo, gracias a la extensión de los horarios de servicio, autorizada por diversas delegaciones, como Cuauhtémoc, a restaurantes y bares de la ciudad.

Rafael de Jesús Saavedra, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera (Canirac) calculó que alrededor de 70 mil personas acudieron a los 300 establecimientos que se acogieron a la extensión de horarios. "Principalmente en la zona sur, como San Angel, donde el lleno fue prácticamente total mientras que más al centro, en las colonias Juárez, Condesa y Roma, se ocupó apenas 50 por ciento de su capacidad."

Aunque no todos los establecimientos se acogieron a tal concesión ni tampoco hubo lleno total en los negocios que ofertaron promociones especiales en la venta de cerveza y licores para que sus clientes aguantaran la desvelada y disfrutaran el encuentro del equipo mexicano con su similar de Croacia, el triunfo obtenido por el representativo nacional provocó que unos 6 mil aficionados se concentraran en el Angel de la Independencia a partir de las tres de la mañana sin importar que fuera el primer día laboral de la semana.

En cambio, madrugaron vendedores ambulantes de botes de espuma y pintura en aerosol, banderas y distintivos tricolores de todos los tamaños, confeti y cornetas.

En general el saldo de la jornada fue blanco, según informó el secretario de Seguridad Pública, Marcelo Ebrard, pero se registraron algunos incidentes.

No escasearon las botellas de cerveza y alcohol entre quienes se dieron cita en el Angel e incluso hubo cohetones, tres en total que hicieron explotar los pasajeros de un microbús alrededor de las 3:45 de la mañana, al circular por la lateral de Paseo de la Reforma.

La policía pretendió detener a varios jóvenes que protagonizaron una trifulca, pero los dejaron en libertad luego de que la multitud rodeó a los uniformados.

Además, la euforia hizo que los fanáticos se lanzaran contra una joven que portaba como vestido una bandera nacional para arrancárselo con el ánimo de verla desnuda, pero se quedaron frustados porque la mujer llevaba una malla color carne debajo del lábaro patrio.

Para proteger la Columna de la Independencia, desde mediodía la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) ordenó la instalación de vallas metálicas y al anochecer granaderos y policías auxiliares reforzaron la vigilancia. El operativo concluyó a las seis de la mañana, cuando fueron reabiertas las vialidades y unos 200 personas, en su mayoría jóvenes, todavía permanecían en el Angel.