La embajada de Bulgaria les pidió negociar
la libertad de Krassimir Kiriloviankov
Rechazan campesinos de Atenco liberar a los empleados
retenidos
Exigen la documentación completa de los estudios
que realizaban en torno al nuevo aeropuerto
JAVIER SALINAS CESAREO Y RENE RAMON ALVARADO CORRESPONSALES
San Salvador Atenco, Mex., 1º de junio. La
empresa Sistemas Avanzados y Proyectos, cuyos trabajadores y director general,
Krassimir Kiriloviankov ?de origen búlgaro?, permanecen retenidos
desde la noche del viernes por habitantes y campesinos de esta localidad,
fue contratada para realizar trabajos en los ejidos expropiados de fotogrametría,
topografía y cartografía para el plan de construcción
del sistema de tres autopistas en torno al proyecto de nuevo aeropuerto
en Texcoco, requerido por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes
(SCT).
Insistente petición diplomática
Personal
de la embajada de Bulgaria en México se comunicó vía
telefónica -en varias ocasiones- con los campesinos pidiendo una
negociación para liberar a Kiriloviankov, sin embargo, los ejidatarios
advirtieron que no lo liberarán hasta en tanto se les entregue la
documentación completa de los estudios que ha realizado dicha empresa
en torno a la construcción de la nueva terminal aérea.
La detención de los ingenieros y topógrafos
demuestra que el gobierno federal ''violó los ordenamientos de la
justicia federal, que otorgó la suspensión de plano del decreto
al ejido San Salvador Atenco''. La suspensión, concedida por un
juez federal de Nezahualcóyotl, impide la realización de
cualquier obra o trabajo en estos terrenos, sostuvieron abogados de los
núcleos ejidales expropiados el pasado 22 de octubre.
Según consta en un documento, la empresa Sistemas
Avanzados y Proyectos fue contratada desde el pasado 14 de mayo para efectuar
dichos estudios de parte del Grupo OHL (Obrascón Huerte Lain) sucursal
México. A este grupo empresarial la SCT del estado de México
le asignó el proyecto técnico y estudio de factibilidad del
sistema de autopistas del oriente de la entidad.
Las tres autopistas del proyecto que se planea conecten
con el nuevo aeropuerto en Texcoco son: Atizapán-Venta de Carpio
y sus ramales Huehuetoca y Ecatepec-Venta de Carpio-Texcoco-Chalco y Chalco-Nepantla.
Durante este sábado, los cuatro trabajadores de
la empresa, detenidos desde la noche del viernes -Edmundo Lozada, José
Luis López, Juan Carlos Jiménez y Jonathan Valle-, así
como su director Krassimir Kiriloviankov y su acompañante Gerardo
Agustín Galgera, continuaron retenidos por los campesinos. Por la
tarde, los ejidatarios liberaron a Jonathan Valle debido a su deteriorada
condición de salud.
Kiriloviankov informó en asamblea a los atenquenses
que desde hace 15 días se iniciaron en sus ejidos los trabajos de
levantamiento de fotogrametría, cartografía y topografía
para la elaboración de los proyectos carreteros. Explicó
que por este trabajo cobrarían un millón 575 mil 776 pesos.
Las labores comenzaron el viernes
Juan
Carlos Jiménez Márquez, ingeniero de la obra, abundó
que desde el pasado viernes a las 17 horas instalaron en tres puntos del
valle de México (El Caracol, en Ecatepec; los ejidos de San Salvador
Atenco, y en el municipio de San Vicente Chicoloapan) tres equipos GPS,
que sirven para dar un posicionamiento y obtener coordenadas geográficas.
Detalló que estos aparatos reciben una señal
satelital ''formando una triangulación para obtener una precisión
en el levantamiento geodésico que permite la restitución
de las fotografías áreas, tomadas con anterioridad desde
un helicóptero, las cuales no tienen las coordenadas exactas por
el movimiento de la aeronave''.
De acuerdo con los planos, fotografías y trípticos
que los ejidatarios confiscaron a los trabajadores, el plan de tres autopistas
del oriente del estado de México forma parte del Proyecto regional
de gran visión, ocho entidades federativas. En éste se
especifican los trazos carreteros que se construirán en torno al
nuevo aeropuerto.
La documentación detalla los trazos de las nuevas
vialidades que conectarán a la terminal aérea con los estados
de México, Tlaxcala, Morelos, Hidalgo, Puebla, Michoacán,
Guerrero, Veracruz, así como al Distrito Federal.
Durante todo el día se vivió tensión
en San Salvador Atenco. Los tres equipos GPS, tripiés y la información
fotográfica y documental que les confiscaron, así como una
camioneta Nissan y un auto Máxima, permanecieron en la explanada
principal, lo que provocó el enojo de los campesinos, pues dijeron:
''El aeropuerto ya empezó a construirse pese a que nosotros nos
oponemos y tenemos a nuestro favor un amparo''.
El ingeniero búlgaro realizó varias llamadas
telefónicas durante el día, donde pedía a los representantes
de la empresa le hicieran llegar los proyectos, contrato y planos de los
estudios carreteros en torno a la construcción del nuevo aeropuerto,
los cuales fueron exigidos por los ejidatarios a cambio de dejarlos en
libertad. Sin embargo, sólo llegó el contrato, situación
que dejó insatisfechas las demandas de los ejidatarios.
También, personal de la embajada de Bulgaria se
comunicó en varias ocasiones con los campesinos pidiendo una negociación
para liberar al empresario, sin embargo, como no había llegado la
información exigida por los inconformes el diálogo no tuvo
éxito.
Jesús Adán Espinoza, uno de los líderes
de los campesinos, advirtió que de no obtener respuesta favorable
a sus demandas retendrán por 48 horas más a los trabajadores
y el próximo lunes serán llevados a la Suprema Corte de Justicia
de la Nación (SCJN), ''y que Genaro Góngora Pimentel testifique
cómo el presidente Vicente Fox continúa violando la ley''.
Otro incidente
Los labriegos intensificaron sus recorridos de vigilancia
por los ejidos. Se sumaron las comunidades de Acuexcomac, Tocuila, La Magdalena
Ponoaya, Nexquipayac y Francisco I. Madero; en esta última colonia,
los ejidatarios detectaron la presencia de trabajadores de la Compañía
de Luz y Fuerza, quienes realizaban trabajos en un pozo.
Siete de los empleados de la paraestatal permanecieron
retenidos por más de cinco horas. Sin embargo, los campesinos decidieron
ponerlos en libertad tras comprobar que sus labores no estaban relacionadas
con
la construcción del nuevo aeropuerto alterno.