Representantes gubernamentales mantuvieron su
oferta de conceder sólo 42 becas
Fracasa primer encuentro entre estudiantes de la Normal
de Amilcingo y autoridades
Bajo fuerte operativo policiaco se realizó
una manifestación silenciosa frente al palacio de gobierno
LA JORNADA MORELOS
Cuernavaca, Morelos, 27 de abril. El primer encuentro
entre las normalistas de Amilcingo y el gobierno del estado concluyó
sin visos de solución al conflicto, luego que las autoridades únicamente
ofrecieron 42 becas a alumnas de nuevo ingreso, la misma propuesta oficial
presentada desde el inicio de las movilizaciones estudiantiles, hace dos
semanas.
Esta
tarde una comisión integrada por normalistas, padres de familia
y representantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas
de México se encontró en palacio de gobierno con el secretario
de Educación estatal, Ramón Tallabs Ortega; el director del
Instituto de Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM),
Oscar Montealegre Castillo, y el secretario de Gobierno, Eduardo Becerra
Pérez, quien llegó de último momento, pues las estudiantes
amenazaron con irse si no estaba presente.
Si bien se llegó a acuerdos sobre la publicación
de la convocatoria y el examen de admisión, el punto que encendió
el conflicto permanece igual. Mientras las normalistas exigen 180 becas
y ofrecen "bajarse" hasta 105, mismo número que recibieron el año
pasado, el gobierno insistió en que sólo otorgará
42 y "ni una más".
El secretario de Gobierno puso en la mesa, luego de una
discusión de más de cinco horas, la posición del Ejecutivo
estatal: "no aceptamos presiones, no cederemos a las demandas de las normalistas".
El "cañón" y los machetes
Mientras la comisión intentaba convencer con argumentos
al gobierno del estado dentro de palacio, afuera cerca de 5 mil normalistas,
habitantes de Amilcingo y ejidatarios de San Salvador Atenco que se oponen
a la construcción del aeropuerto alterno al de la ciudad de México
presionaban con gritos a los negociadores gubernamentales.
Luego de realizar una marcha silenciosa por las principales
calles del centro de la ciudad, los inconformes se reunieron en la plaza
de armas y se mantuvieron callados hasta que desde adentro les notificaron
que la negociación se entrampó "por la postura del gobierno".
Entonces los normalistas hicieron retumbar las paredes
del palacio al accionar un "cañón" corto con balas de salva.
El ambiente se tornó más tenso cuando descubrieron que la
calle de Nezahualcóyotl se encontraba atestada de elementos de la
fuerza pública dispuestos a entrar en acción.
Sin embargo, policías y simpatizantes de los normalistas
permanecieron en calma.