KOREA JAPAN
Hakan Sükür, la encarnación del atacante a la antigua
Turquía, lista para su segunda Copa del Mundo
AFP
Turquía se clasificó para el primer Mundial asiático de la historia, que disputará 48 años después de su participación en Suiza 1954.
Después de una Eurocopa de Naciones 2000 bastante bien controlada, los turcos abordaron la competición universal con entusiasmo y sin complejos.
La selección turca se benefició con el "exilio" de sus mejores jugadores a Europa, donde acopiaron experiencia en diferentes estilos.
A fuerza de frecuentar el más alto nivel, los mejores futbolistas turcos lograron conformar un conjunto homogéneo, ocasionando enormes problemas a sus adversarios.
Senol Günes, que tomó las riendas de manos de Mustafá Denizli luego de la Eurocopa-2000, conservó la mayoría del destacado cuadro. Los "pilares" están siempre presentes: del portero Rüstü al goleador Hakan Sükür, pasando además por Alpay, Tugay, Okan Buruk y Arif. Algunos jóvenes se agregaron para aportar un poco de sangre nueva, como Yildiray Bastürk, un atacante con mucho valor.
Los turcos efectuaron una buena ronda clasificatoria. Incluso tendrían que haber terminado primeros del grupo y evitar la repesca contra Austria (1-0, 5-0), ya que dejaron el liderazgo de la llave únicamente en el penúltimo encuentro, perdiendo como locales contra Suecia (1-2).
Senol Günes
Cuando el seleccionador Mustafá Denizli renunció luego de la Eurocopa-2000 para dirigir al Fenerbahce, la federación turca sorprendió a los especialistas al elegir a Günes para el remplazo.
Incluso sus detractores le reconocen grandes cualidades: es franco, inteligente y posee una real visión del juego. Se toma el oficio de entrenador muy a pecho y es un trabajador infatigable, a un punto tal que en 1995 tuvo que ser hospitalizado debido al agotamiento físico.
Gunes afrontó las críticas y el escepticismo con fortaleza, y clasificó a Turquía para el segundo Mundial de su historia, con lo cual anunció sus objetivos para el Mundial 2002: cuartos de final.
Hakan Sükür
Estrella indiscutida del futbol turco, Hakan Sükür es la personificación del atacante a la antigua: potencia, combatividad y un juego aéreo fuera de lo común, cualidades que constituyen las principales fuerzas del Toro del Bósforo.
Además de ser el goleador de la selección, Hakan Sükür es también un hueso duro de roer para los defensas, por sus cualidades para devolver los pases en profundidad.
Tras el fracaso, personal y de equipo, en la Eurocopa 1996 realizada en Inglaterra -Turquía fue último del Grupo D al no ganar ningún partido ni marcar goles-, Hakan volvió a encontrarse con el triunfo y la eficacia en Turquía.
Máximo goleador de Turquía en 1997, 1998 y 1999, con 38, 32 y 19 goles, respectivamente, tras un excelente desempeño en la Eurocopa 2000, a los 28 años fue transferido al Inter de Milán. Sin embargo, pasa más tiempo en la banca que en el centro del ataque.