Continúan las movilizaciones del magisterio disidente en Guerrero y Oaxaca

"Una huelga trabajando", anuncia el SNTE

Mientras la parte oficialista del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) anunció que su método para obtener mejores condiciones y más recursos a la educación será "una huelga trabajando", maestros disidentes iniciaron ayer un paro en Guerrero y ocuparon oficinas en esa entidad y en Oaxaca.

Rafael Ochoa, secretario general del SNTE, anunció que a partir del primero de junio, millón y medio de afiliados a ese gremio comenzarán "una huelga trabajando" en protesta por el incremento salarial de 9.11 por ciento otorgado por el gobierno federal el pasado 15 de mayo.

Al iniciar en Aguascalientes y Zacatecas una gira por todo el país, el dirigente señaló que a diferencia de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), que convocó a paros escalonados en toda la República, la parte oficial del sindicato trabajará bajo protesta portando algún moño y colgando mantas en las escuelas públicas. "No será una medida que nos avergüence", explicó.

A diferencia de esta postura, maestros afiliados a la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG, que pertenece a la CNTE) comenzaron un paro indefinido en apoyo a sus colegas que se manifiestan en la capital del país en demanda de aumento salarial y la no privatización del ISSSTE.

El vocero de la CETEG en Acapulco, Román Meynardo López, dijo que el próximo jueves más de 120 mil alumnos se quedarán sin clases al iniciar los maestros una marcha hacia la capital del país, y otra en Chilpancingo para solicitar se cumpla el pliego de peticiones del magisterio.

Otra vocera de la CETEG en Acapulco, Marisela Martínez Reséndiz, exigió que la Secretaría de la Contraloría y Desarrollo Administrativo investigue el destino de los recursos de pensionados del magisterio en el país que serán liquidados hasta noviembre próximo.

En Oaxaca, integrantes de la sección 22 del SNTE (que también milita en la CNTE) ocuparon las oficinas de la Secretaría de Finanzas del gobierno estatal para exigir que éste absorba todos los gastos en las escuelas y evitar que los padres de familia paguen "cuotas voluntarias".

Anunciaron que este miércoles llegarán a la capital oaxaqueña más de 20 mil profesores que laboran en la región de los Valles Centrales para realizar una marcha e iniciar un plantón de tres días frente al palacio de gobierno.

Agregó que los gobiernos estatal y federal no han dado respuesta a sus demandas, que consisten en el rescate del sistema pensionario y la dotación de uniformes y desayunos escolares.

Por su parte, el director del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), Froylán Cruz Toledo, declaró que de las demandas magisteriales, al gobierno del estado le incumbe 20 por ciento y la administración del gobernador José Murat "está en la mejor disposición de responder a cada uno de esos puntos". Señaló que se gestiona ante la Secretaría de Educación Pública en la capital del país para avanzar en la solución de las demandas.

En Chiapas, cuyas secciones 7 y 40 pertenecen a la CNTE, el líder de esta última, David Aguilar, se hizo eco del llamado de su dirigencia nacional y anunció que renuncian a los paros como forma de presión para solicitar mejores condiciones de trabajo. A partir de ahora, dijo, sus protestas consistirán en portar un distintivo en el brazo, pegar pancartas en las afueras de las aulas y escuelas, y enviar cartas a los padres de familia informándolos y concientizándolos sobre las condiciones en que sus hijos reciben los servicios. Exigió la aplicación de una auditoría al programa de carrera magisterial y nuevas plazas para poder atender a los niños que no reciben los servicios por falta de maestros.

Igual que en Chiapas, los más de 40 mil maestros de las secciones 21 y 50 del SNTE de Nuevo León iniciaron acciones de protesta en sus centros de trabajo, sin suspender clases, para externar su descontento con el bajo incremento salarial.

En Jalisco, los dirigentes de las secciones 16 y 47 anunciaron que a partir del próximo lunes los más de 60 mil afiliados al SNTE iniciarán una "huelga" que consiste en seguir trabajando, pero portando brazaletes y diademas con letreros solicitando mayor presupuesto. Por separado, integrantes del Movimiento de Bases Magisteriales de Jalisco cumplieron cinco días en ayuno y siguen en espera de ser atendidos por las autoridades educativas.

CLAUDIO BAÑUELOS, MISAEL HABANA, VICTOR RUIZ, ANGELES MARISCAL, DAVID CARRIZALES Y CAYETANO FRIAS