Entre los detenidos habría dos jefes del ELN
Tiroteo entre rebeldes y uniformados colombianos deja nueve muertos
AFP Y REUTERS
Santafe de Bogota, 21 de mayo. Al menos nueve muertos, 33 heridos y 55 capturados es el resultado de un tiroteo en el centro de Me-dellín, la segunda ciudad colombiana, en el contexto de una operación desplegada por los organismos de seguridad contra presuntos guerrilleros, informaron las autoridades.
El comandante de la policía metropolitana de Medellín, general Leonardo Gallego, aseguró que entre los detenidos se encuentran por lo menos dos cabecillas del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y un enlace entre este grupo y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El comandante de la cuarta brigada militar, general Mario Montoya, señaló que en-tre las víctimas mortales se hallan dos me-nores atrapados en los combates que libraron desde la mañana de hoy los presuntos guerrilleros con efectivos del ejército, la po-licía, el servicio secreto y la fiscalía.
Los combates comenzaron luego que en la madrugada cerca de 900 hombres de elite con cascos, chalecos antibalas y fusiles de asalto comenzaron la denominada Operación Mariscal.
Leonardo Gallego, comandante de la policía de Medellín, indicó que la acción busca desarticular comandos urbanos de las FARC y el ELN que actúan en sectores pobres, como parte de una estrategia de los rebeldes para llevar el conflicto armado del campo a las ciudades.
En este marco, el comandante de las fuerzas militares, general Fernando Tapias, aseguró que las elecciones, para las que se inscribieron 11 candidatos, se llevarán a cabo el próximo domingo.
Por su parte, la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Bogotá responsabilizó a las FARC, a los paramilitares de extrema derecha y al Estado colombiano por la ma-tanza de 119 civiles en el poblado de Bojayá, el pasado 2 de mayo.
Las responsabilidades están señaladas en un informe entregado al presidente Andrés Pastrana, que recoge las conclusiones de una visita que realizó esa misión, encabezada por el representante del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, el sueco Anders Kompass, para verificar la situación en Bojayá.
En el informe el organismo califica la ma-tanza de "crimen de guerra" cometido por los grupos armados ilegales, y criticó al Estado por no haber protegido a la población civil, pese a que había alertas de organismos civiles sobre el peligro que corrían los pobladores de la zona.