Comienza hoy el presidente de EU una gira por Alemania, Francia, Rusia e Italia
Multitudinario mitin de repudio a Bush en Berlín
Pide Partido del Socialismo Democrático enjuiciar al mandatario por crímenes de guerra
REUTERS, AFP Y DPA
Berlin, 21 de mayo. Más de 20 mil manifestantes alemanes marcharon hoy pacíficamente por Berlín en repudio a la política belicista de George W. Bush en el mundo, en la víspera del comienzo de una gira europea de una semana del presidente estadunidense que se prolongará a Rusia, Francia e Italia.
Bush buscará "tranquilizar" a los líderes europeos por las amplias diferencias que persisten en sus políticas unilaterales en numerosos temas, en tanto que en la Duma en Moscú se percibe la supremacía de Washington a pesar de que el canciller Igor Ivanov afirmó que se obtuvieron recortes en el proyecto del escudo antimisiles estadunidense y que Rusia mantendrá su capacidad de ataque con ojivas de cabezas múltiples.
Ante las masivas protestas en Alemania por su visita que comenzará este miércoles, Bush aseguró a la televisión alemana que no le molestaban y las calificó como signo de "democracia", mientras que la policía se mantenía en estado de máxima alerta y la embajada estadunidense en Berlín pidió a sus ciudadanos evitar las protestas.
En declaraciones al diario alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung, el mandatario aseveró que de cara a su gira europea aún quedan "muchas y duras" tareas por cumplir en la guerra contra el terrorismo porque ésta "no ha finalizado ni por lo lejos".
Respecto de Irak, sostuvo que no cesará de denunciar de modo claro la "amenaza" que representa ante lo que definió como "intentos de chantaje" con armas de destrucción masiva, pero negó tener en su escritorio planes concretos de alguna acción bélica contra Bagdad.
En las manifestaciones, en que según la policía participaron unas 20 mil personas, que los organizadores elevan a 100 mil, las protestas se dirigieron sobre todo contra la política militar de Estados Unidos y su llamada guerra internacional contra el terrorismo, lo que no tiene nada que ver con el pueblo estadunidense, dijeron algunos líderes participantes en las marchas.
"Bush terrorista" y "Estados Unidos, país de terroristas", eran algunas de las consignas, sumadas a la clásica "Yanqui, go home" y la exhibición de pancartas en las que se leía "No petróleo por sangre" y "El mal pasa por el Pentágono", en alusión a la consigna de Bush de que Irán, Irak y Corea del Norte son un "eje del mal".
Los manifestantes expresaron su repudio a las amenazas de un eventual ataque a Irak, y especialmente resaltaron su rechazo al apoyo de Washington a la política militarista del primer ministro israelí Ariel Sharon en los territorios palestinos ocupados.
En lo que se refiere al conflicto en Medio Oriente, Bush afirmó que "la paz es posible" incluyendo a Yasser Arafat. Dijo que es necesario que Estados Unidos se comprometa en esos esfuerzos, que Israel tome "decisiones difíciles", que los palestinos renuncien al terrorismo y el mundo árabe participe en forma "constructiva".
Inconformidad europea
En la marcha de protesta participaron desde miembros del poscomunista Partido del Socialismo Democrático (PSD) hasta los del Verde Ecologista, al grito de "no queremos sus guerras, señor presidente", y los dirigentes del PSD señalaron que "Bush debería ser llevado ante un tribunal de crímenes de guerra".
En Europa hay inconformidad ante las decisiones unilaterales de Washington en su guerra antiterrorista, su política en Medio Oriente y sus amenazas a Irak, así como en materia ambiental por su retiro del Protocolo de Kyoto, su rechazo a adherirse al Tribunal Penal Internacional, los elevados aranceles aplicados a las importaciones del acero y otros productos o su resistencia a ayudar en la crisis del sida en Africa.
El primer ministro británico Tony Blair, el principal aliado de Washington, declaró al diario londinense The Times que Europa no debe distanciarse de Estados Unidos a pesar de las políticas unilaterales de Washington en materia comercial y en la lucha contra el terrorismo internacional, y que no se debe pedir a Gran Bretaña elegir entre Europa y Estados Unidos.
Unos 10 mil policías se alistan para cuidar el orden ante las crecientes protestas en Berlín para el primer día de visita de Bush, quien se entrevistará con el canciller federal Gerhard Schroeder y el jueves pronunciará un discurso ante el Parlamento.
"El carácter limitado del escudo antimisiles será precisamente estipulado en el texto de la declaración" conjunta sobre relaciones estratégicas, señaló a su vez el canciller Ivanov ante el Parlamento de su país, aunque los críticos resaltaron la supremacía de Washington y la pérdida de paridad en las armas de largo alcance.
A dos días de la firma del tratado sobre desarme entre Bush y Vladimir Putin, Ivanov insistió en que su país mantendrá la posibilidad de equiparar sus misiles balísticos intercontinentales con ojivas de cabezas múltiples, que analistas califican como "propaganda" previa a la cumbre de Roma.