Estiman que Fox insistirá en reformar el sector
Anuncia el SME una nueva etapa de lucha contra la privatización eléctrica
FABIOLA MARTINEZ
El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) definirá en breve una "nueva etapa de lucha" ante la insistencia del presidente Vicente Fox de abrir la industria eléctrica al capital privado.
Las declaraciones del mandatario en su reciente gira por Europa instaron a los trabajadores sindicalizados de Luz y Fuerza del Centro a programar una asamblea general a realizarse en junio, en la que delinearán su plan de acción.
"El SME refrenda su postura opositora y continuará en la descubierta de esta lucha en defensa del carácter público de la industria eléctrica. Seguiremos como ariete para no dejar pasar la privatización", señalaron fuentes del sindicato.
Desde el 2 de febrero de 1999, esta organización que agremia a 45 mil empleados en activo y jubilados se opuso a la reforma constitucional propuesta por el entonces presidente Ernesto Zedillo. Una semana después convocaron a la integración del Frente Nacional de Resistencia contra la Privatización de la Industria Eléctrica y se declararon en asamblea permanente para este mismo fin.
Ahora dieron por concluida esa etapa y anunciaron que delinearán nuevas acciones, pues consideran que el presidente Fox insistirá en el camino de la reforma por conducto del Congreso, luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación dictaminara inconstitucional un decreto para ampliar la participación de la iniciativa privada en el sector eléctrico.
"Sabemos que tras el fallo de la Suprema Corte Fox volverá a enviar una iniciativa de reforma, porque ya tiene mucha presión de los organismos financieros internacionales y de los socios comerciales del país; por eso hoy estamos listos para empezar un nuevo plan de acción."
Fuentes consultadas del SME que definen la estrategia en cuestión reconocieron que las recientes declaraciones del Ejecutivo en Europa "rompen el lapso de tranquilidad" que había entre los afiliados a este sindicato y, en este sentido, expresaron que reforzarán su postura de un "no rotundo" a la privatización.