No participó Chávez en una de
las reuniones; estos encuentros son "ineficaces", afirmó
Termina cumbre de Madrid sin acuerdo sobre un pacto
de libre comercio
Críticas del presidente Jacques Chirac al unilateralismo
y proteccionismo de Estados Unidos
REUTERS, AFP Y DPA
Madrid, 18 de mayo. El presidente venezolano, Hugo
Chávez, se rehusó a participar en una reunión del
último encuentro de la segunda cumbre entre la Unión Europea
(UE), América Latina y el Caribe, al considerar que son "ineficaces".
De hecho, la reunión en Madrid concluyó este sábado
sin que se concretara acuerdo alguno para el establecimiento de un pacto
de libre comercio entre América Latina y Europa, y sólo se
logró un compromiso de cooperación para combatir el terrorismo
y el narcotráfico.
Luego de dos días de deliberaciones, lo que sí
quedó patente fue el malestar por el unilateralismo y el proteccionismo
de Estados Unidos, país para el que las naciones al sur del río
Bravo siguen siendo su "patio trasero", y en torno a lo cual sólo
el presidente francés, Jacques Chirac, se atrevió a criticar.
El presidente español, cuyo país ejerce
la presidencia rotativa de la UE, José María Aznar, afirmó
que aún no están dadas las condiciones para negociar un acuerdo
comercial con la Comunidad Andina de Naciones (CAN) debido a problemas
tarifarios que afectan los intercambios dentro del bloque.
Pero fue Chávez quien agitó las aguas, al
reclamar la necesidad de redefinir las cumbres eurolatinoamericanas porque
"estamos en un laberinto sin salida" en cuanto a la urgencia "de solución
a los problemas socioeconómicos de Latinoamérica; vamos lentos
y muy mal".
Aseveró que mientras los mandatarios del mundo
"vamos de cumbre en cumbre, nuestros pueblos van de abismo en abismo".
A pesar de ser uno de los presidentes más ovacionados
en la sala de prensa y en las calles, Chávez recordó el incumplimiento
de los acuerdos de la anterior cumbre. Citó que la Declaración
del Milenio abogó contra la pobreza, pero a dos años
ésta sigue creciendo.
El presidente venezolano, quien también criticó
los esfuerzos internacionales por colocar a las FARC en la lista negra
de organizaciones terroristas, aseguró que aún existe el
riesgo de ser víctima de otro intento golpista ante la falta de
avances en el diálogo nacional, e incluso denunció que los
golpistas tenían la "intención de matarlo" en los hechos
de abril pasado.
Reproche de Aznar a Chávez
Aznar,
el único presidente que se adelantó en reconocer a los golpistas
del efímero régimen del empresario Pedro Carmona, se encargó
más tarde de reprochar a Chávez su ausencia de la reunión
entre la UE y la CAN de este día, al señalar que le hubiera
gustado escuchar sus puntos de vista, y que "debería participar
en vez de criticar".
Al referirse a la controversia di-plomática con
España, que firmó junto con Estados Unidos una de-claración
que llamaba a la consolidación democrática venezolana y daba
por hecho su salida de la presidencia, Chávez puntualizó
que ambos países, como muchos otros, "han sido víctimas de
la desinformación de medios venezolanos".
En Venezuela, paralelamente, se reunieron periodistas
del Observatorio Global de Medios, y destacaron que hay quienes "creen
que pueden cometer un crimen mediático sin que nadie en el mundo
se entere. En este momento decenas de estudiosos están trabajando
sobre este crimen mediático que se ha cometido aquí y que
se comete aún".
Para el director de Radio Francia Internacional,
Ramón Chau, en Venezuela no hubo un golpe de Estado sino un golpe
de prensa. Además, este "golpe de prensa" no se limitó a
Venezuela, ya que "la mafia que dio el golpe tiene ramificaciones en Miami
y España".
En contraste el presidente brasileño, Fernando
Henrique Cardoso, lanzó una fuerte advertencia contra "los conspiradores"
que persiguen objetivos golpistas en América Latina, al recordar
la "rápida reacción" de respaldo a la democracia en Venezuela,
y puntualizó: "Que el precedente contribuya a disuadir a los conspiradores
de guardia, cualquiera sea su cobijo".
Por otro lado, UE rechazó la intención de
Perú de negociar un pacto comercial por su cuenta. El presidente
de la Comisión Europea, Romano Prodi, señaló que no
se pueden "alentar posiciones unilaterales", por lo que se frustró
la aspiración de Lima de alcanzar una asociación comercial
como la que tiene México y la que acaba de finalizar Chile con los
europeos.
Para atajar la ansiedad de la asociación comercial
formada por Bolivia, Ecuador, Perú, Colombia y Venezuela, la UE
aceptó negociar con su contraparte un acuerdo político y
de cooperación a ponerse en vigencia a más tardar en 2004,
que significará la suscripción de un acuerdo de asociación
"viable" para un área de libre comercio.
Se trata de "una estrategia a largo plazo", expresó
Prodi al término de una reunión celebrada por Aznar y su
sucesor danés, Anderes Fogh Rasmussen, con los mandatarios de los
países andinos, entre los que no estuvo Chávez.
En síntesis, la futura asociación de libre
comercio como la alcanzada por México y Chile dependerá del
logro de los objetivos del acuerdo de diálogo político y
cooperación referentes al fortalecimiento de la democracia, buen
gobierno, respeto a los derechos humanos y el fomento de la integración
de la CAN y la promoción de beneficios de desarrollo económico.
El presidente de la CAN, el boliviano Jorge Quiroga, aseveró
que han dejado en claro que les interesa avanzar con la máxima celeridad
posible y que "somos conscientes de que tenemos que hacer la tarea de casa",
de modo que se pueda alcanzar la integración comercial y la apertura
de mercados.
En ese contexto, asentó, es indispensable la ayuda
internacional mediante la apertura de mercados, porque "es imposible tener
programas integrales de lucha contra el narcotráfico si no se complementa
con el acceso a mercados de otros productos" alternativos a la coca.
En lo que se refiere a la XVIII reunión ministerial
del Diálogo de San José, concluyó con la decisión
de relanzar este foro entre la UE y Centroamérica a través
de una agenda renovada y la fijación de más encuentros entre
las partes.
Pero, al igual que en la Declaración de Madrid
signada la víspera, se condiciona también un acuerdo de libre
comercio al cumplimiento de una serie de requisitos en 2004.
En la nueva agenda común entre los ministros de
la UE y los centroamericanos destacan, además de temas tradicionales
como democracia, derechos humanos, estado de derecho y sociedad civil,
asuntos como la lucha contra el terrorismo, el medio ambiente y los desastres
naturales.
El canciller nicaragüense y presidente protémpore
del Sistema de Integración Centroamericana, Norman Caldera, dijo
que de todos modos no hay frustración entre los países centroamericanos,
porque "hemos llegado a un acuerdo que es beneficioso para todos, que abre
una ventana a la oportunidad que ojalá sepamos aprovechar todos
en su debido momento".
EU, protagonista involuntario
Así, en medio de una serie de condicionantes para
Latinoamérica, que se quiera o no arroja desilusión entre
sus países, Estados Unidos apareció como protagonista involuntario
por las que fueron calificadas como sus políticas "proteccionistas
y unilaterales", como las llamó Jacques Chirac en declaraciones,
a las que el canciller español, Josep Piqué, quiso restar
im-portancia al comentar que se trataba de una "alusión general"
contra quienes apelen a esas políticas.
Con todo, quedó claro que los 48 gobernantes presentes
censuraron medidas como la polémica ley Helms-Burton, dirigida contra
las inversiones en Cuba, o lo aranceles recién impuestos por Washington
a la importación de acero, madera y algunos productos agrícolas.
Otro malestar de los líderes reunidos en Madrid
se refiere al reclamo a la "adhesión universal" al estatuto del
Tribunal Penal Internacional, del que Estados Unidos se retiró recientemente,
o la ratificación y la pronta entrada en vigor del Protocolo de
Kyoto sobre reducción de los gases con efecto invernadero, que George
W. Bush se niega a firmar.