Rechaza la "amnistía" para 3.5 millones
de connacionales; es un deseo "místico"
Que los indocumentados vayan, trabajen y se regresen,
propone el congresista Tom Tancredo
Niega ser antimexicano, pero advierte sobre un "brote
xenofóbico" en su país
Señala que los trabajadores ilegales no reportan
beneficios a la economía estadunidense
ROBERTO GARDUÑO Y ANDREA BECERRIL ENVIADOS
Guanajuato, Gto., 18 de mayo. La pregunta molesta
al representante republicano por el estado de Colorado, Tom Tancredo: "¿Antimexicano
yo? ¡No! Pero si yo viviera en México bajo las condiciones
de mucha gente, ya estaría haciendo lo mejor de mi parte para irme
a Estados Unidos, porque aquí hay mucha gente que está muy
mal, y no los culpo para nada, definitivamente no".
Afamado
por su oposición a los trabajadores indocumentados, el legislador
justifica la xenofobia si no se controla el flujo migratorio en la frontera
de ambos países.
Este congresista, que representa a una creciente población
antiinmigrante en Estados Unidos, y que se ha distinguido por proponer
medidas drásticas, como cerrar la frontera de ese país con
México para impedir el cruce de ciudadanos indocumentados de nuestro
país, descarta la amnistía para 3.5 millones de trabajadores
de origen mexicano en el país vecino, y a eso añade que regularizar
la migración ilegal no es más que "un tema místico".
-¿Por qué rechaza a priori a la amnistía.
-Lo que estamos pidiendo es un programa de trabajadores
temporales, que lleguen a trabajar por cierto periodo y se regresen. La
idea de la amnistía va en contra de eso, esperamos que la gente
vaya a Estados Unidos, trabaje y se regrese, pero con la amnistía
los indocumentados no van a cerrar ese círculo.
Hombre cincuentón y de carácter afable,
que no corresponde con su fama de franco opositor a los trabajadores indocumentados
en Estados Unidos, Tancredo justifica la posibilidad de un brote xenofóbico
contra ciudadanos mexicanos que cruzan la frontera en forma ilegal.
"Si no controlamos este flujo mejor de lo que estamos
haciendo ahora, entonces nos arriesgamos a que se desarrolle ese fenómeno.
Seguramente habrá una reacción. Esto siempre se ha dado,
históricamente, en cualquier país, no sólo en Estados
Unidos, donde hay gran número de personas con diferentes culturas,
hay una reacción de rechazo de la población nativa, y yo
quiero evitar eso.
"La mejor manera de hacerlo es administrar la frontera,
no cerrarla, no construir una pared, se debe administrar con procesos legales.
Compartimos una larga historia y compartimos una gran frontera, pero seguimos
siendo dos países separados, no como sugiere el señor Juan
Hernández (funcionario foxista), que dice equivocadamente que la
frontera es una región."
-Usted es profundamente antimexicano, se afirma.
-El problema es que tenemos números masivos de
migrantes. Antes, la gente que llegaba a Estados Unidos se integraba rápidamente
a la sociedad, y ahora para nosotros es difícil que eso suceda en
el caso de los mexicanos, sobre todo teniendo una inmigración masiva.
Eso no me hace a mí antimexicano. Yo les puedo decir que amo a México,
y me encantan los mexicanos, y yo encuentro mucha afinidad con los inmigrantes
mexicanos porque yo soy producto de la inmigración italiana, y hay
mucha similitud en nuestra naturaleza; somos muy abiertos, chistosos, graciosos,
tenemos un enorme corazón y somos the little people (chiquitos),
ja, ja, ja. Entonces por eso tengo gran amor por esta nación.
La amnistía masiva no va a pasar
Durante un receso de la 41 Reunión Interparlamentaria
México-Estados Unidos, el representante Tancredo muestra, poco a
poco, su exacta dimensión antiinmigrante:
-Ya se trabaja (en) una propuesta binacional para legalizar
a 3.5 de inmigrantes mexicanos en Estados Unidos. ¿Qué opina
usted que se opone de facto a esta idea?
-Esa idea alienta a la migración y fue lo que pasó
en 1986. Es lógico, ¿quién no pensaría que
ese sería el resultado? Es lógico si se le dice a la gente
que entra ilegalmente 'fórmate en la cola para que tengas tu ciudadanía'
y, ¿qué le decimos al resto de la gente de todo el mundo?
A aquellos que están esperando pacientemente y que año con
año llenan sus formas de migración. Lo que les decimos es
que para entrar a Estados Unidos hay que hacer las cosas correctamente.
De otra forma, ¿qué les decimos? Que todos los mexicanos
serán legalizados. Cuando ustedes le preguntan a la gente de Estados
Unidos y de otros países, nos dicen en encuestas que no les gusta
la inmigración ilegal; toda esa gente no quiere la amnistía.
Así que es difícil hacer y fabricar una política que
no reconozca esta realidad.
-Usted argumenta una y otra vez que la regularización
de la migración impactará la economía de Estados Unidos.
¿Cuáles son sus argumentos?
-Hay un gran debate en cuanto al tema, porque primero
vemos cuál es el beneficio para Estados Unidos. No es de beneficio
para nuestra economía, porque el trabajo de millones trabajadores
ilegales paga muy pocos impuestos. Y el costo para las escuelas, hospitales,
carreteras y otros servicios sociales son muy altos, por lo tanto, hay
muchos estadunidenses que dicen que no nos estamos beneficiando tanto.
El número masivo de trabajadores que ganan bajos ingresos crean
mayores utilidades para poca gente, y grandes costos para muchos.
-Pero es innegable que el trabajo de los mexicanos le
ha generado gran riqueza a su país; la dependencia en su país
de este tipo de trabajo es considerable, usted debe reconocer eso ?se le
replica.
--Sí, si no hubiera demanda no habría oferta.
Sí hay demanda de muchos empleados y tenemos capacidad para dar
ese empleo a trabajadores que ganen poco y que tengan esa habilidad, porque
reduce la presión de las tasas de salarios.
"Hay mucha gente que está dispuesta a trabajar
por poco dinero, por lo tanto, hay oferta y demanda, pero esto es debatible
para nuestra economía, porque antes que nada debemos proteger nuestros
derechos y poder administrar nuestra propia frontera. Lo único que
pedimos es que los mexicanos manejen de manera honesta su propia frontera,
es la única manera de que podamos asegurar un proceso legal para
los trabajadores que entran a Estados Unidos.
El campo, tema adicional en Guanajuato
El
congresista estadunidense advierte que regularizar la situación
migratoria de 3.5 millones de mexicanos que viven en su país es
un "tema místico", y reitera su rechazo a una amnistía que
beneficie a este grupo de connacionales
-Pero más que nunca persiste la idea en México
y Estados Unidos por regularizar a los indocumentados mexicanos.
-Se dicen grandes cosas hoy. El gobierno de México
tiene el deseo de regularizar a todas las personas que están viviendo
en Estados Unidos, pero incluso eso para mí es un tema místico.
Ahora les puedo decir que después el 11 de septiembre no hay forma
en la cual vaya a haber una amnistía masiva, no va a pasar, la solución
política no está ahí.
-A la idea de regularizar se suma la postura de la delegación
de legisladores mexicanos, que advirtieron que el incremento de los subsidios
al campo de Estados Unidos provocará una catástrofe en el
campo mexicano y se alentará a la migración ilegal a ese
país.
-Estoy de acuerdo, y yo voté en contra de esa decisión
de incrementar los subsidios, ja, ja, ja.
-¿Cómo ha cambiado la relación México-Estados
Unidos con la administración del presidente Vicente Fox? ¿Es
más amigo el actual mandatario que los emanados del régimen
del PRI?
-Sí, la relación de los presidentes George
W. Bush y el presidente mexicano no tiene precedentes, es una relación
positiva.
-¿Es más flexible?
-No diría eso, no diría que el presidente
Fox está cediendo a las demandas de Estados Unidos. No, no, definitivamente
no está pasando eso. Cuando yo estoy hablando de las relaciones
entre los presidentes Bush y Fox estoy hablando de una relación
agradable, positiva y personal. Cada uno entiende las necesidades de sus
países y aboga por ellas; podríamos esperar que de esta relación
positiva no se llegue a establecer un diálogo de sordos.
El diputado Gustavo Carvajal informó por la noche
que Tancredo visitará el país en tres semanas y tendrá
la oportunidad de conocer la realidad nacional, "que dista de ser lo que
él considera y piensa".