Claudio Suárez está fuera del
seleccionado, reiteró Javier Aguirre
El objetivo tangible es empezar bien el Mundial ganando
a Croacia: Vasco
Los tricolores viajaron a EU para el partido amistoso
frente a Bolivia; eludieron a la prensa
ABRIL DEL RIO
Con el humor dicharachero que ha lucido más ante
cámaras desde que tomó las riendas de la selección
nacional, Javier Aguirre, al frente del contingente que ayer emprendió
el viaje a EU para luego continuar al Mundial de Corea del Sur-Japón,
manifestó que la mentalidad que lleva el Tri a ese compromiso
"es la de siempre: tratar de pasarla bien, que juegue bien el equipo mexicano,
que agrade, que gane".
En medio de un tumulto que generaron viajantes y acompañantes
de pasajeros que coincidieron con la salida de los mundialistas, el autobús
llegó una escasa hora antes del vuelo que los llevaría a
San Francisco, donde este jueves enfrentarán a Bolivia en uno de
sus últimos partidos de preparación.
Cruzaron las puertas detectoras tras zafar las marcas,
como en el campo, pero uniformados con elegantes trajes oscuros, pues ni
la protección de agentes de seguridad pudo librarlos de la persecución
de los curiosos que de último momento pretendían autógrafos,
sobre todo jóvenes admiradoras que asediaban y lanzaban gritos a
Rafael Márquez, a Gabriel Caballero, a Luis Hernández y a
Braulio Luna, como si fueran estrellas de rock.
La prisa no era tanto por perder el vuelo, pues ya los
asistentes habían documentado el equipaje y hasta el cargamento
de tortillas y picante que llevaron para no extrañar la comida en
la justa asiática, sino eludir a los medios y a las multitudes.
El Vasco, mientras tanto, se dirigió a toda
prisa a uno de los salones comerciales para ofrecer una conferencia de
prensa, en la que de inicio aclararía que Claudio Suárez
quedó en definitiva fuera de los planes.
Radamés Gaxiola, médico responsable de la
selección, explicó que de acuerdo con el alta del legendario
capitán del seleccionado no es factible tomarlo en cuenta, pues
sólo está capacitado para hacer trabajo ligero.
Aguirre, quien adelantó que "el objetivo tangible
es empezar bien el Mundial ganándole a Croacia", indicó que
no le preocupa el futuro si el resultado no es favorable, pues "la amargura
siempre existe después de los malos resultados, como hay alegría
con los buenos".
Insistió en que "como siempre, soy el mismo hocicón,
hablador, groserón y alburero. Sigo siendo el mismo güey".
-¿Qué podrá ver la gente de México
en el Mundial que no haya visto hasta ahora?
-Nada. Igual, esfuerzo, ganas, deseo, lucha, errores seguramente
los habrá, mal y buen funcionamiento. No hay varitas mágicas
en 15 días.
-¿Hasta dónde es placer o responsabilidad
portar la camiseta nacional?
-Siempre debe ser un placer hacer tu trabajo. Me considero
un afortunado porque hago lo que me gusta, me pagan y tengo la oportunidad
de trascender con México. Siempre debe ser un orgullo estar en la
selección.
"Por lo menos así ha sido para mí desde
el 83. Y por analogía es una responsabilidad, porque no se trata
de un club; hablamos de los mejores jugadores de México."
-Hoy la gente los quería de menos tocar, ¿cómo
te imaginas el regreso?
-Pues si nos va mal nos van a mentar la madre, seguro.
No tengo la menor duda. Si nos va bien van a querer tocar a los que metieron
goles. Así ha sido en los regresos de los Mundiales, de copas América,
con los clubes.
"La gente se deja llevar por su sentimiento, y si les
gusta, aunque pierdan, seguramente habrá palmadas, y si no, aunque
ganen, también te demandarán que algo faltó."
Ya entre la prisa del jefe de prensa que había
confundido a los medios y que daba fin a la conferencia, El Vasco
regresó a petición de las cámaras, a las que dirigió
una sonrisa y unos cariñosos caracolitos, antes de despedirse de
los reporteros con un: "Los voy a extrañar, cabrones".