El ex presidente participa en un simposio sobre interdependencia con Estados Unidos

Evade Ernesto Zedillo opinar sobre el Pemexgate; vine a México a hablar de Yale, dice a periodistas

Varios de sus ex colaboradores, invitados a la conferencia, declinaron tocar el tema

ROBERTO GONZALEZ AMADOR Y JOSE ANTONIO ROMAN

En medio del escándalo por la presunta transferencia de fondos de Pemex a la campaña del PRI en 2000, el ex presidente Ernesto Zedillo hizo ayer su primera aparición pública en la ciudad de México desde que dejó el poder, en la que evadió hablar sobre la legitimidad del financiamiento recibido por su partido en la pasada contienda presidencial.

Al participar en el simposio Interdependencia: México, Estados Unidos y el mundo, organizado por la Universidad de Yale, Zedillo aprovechó la oportunidad para reunir en el foro a algunos de sus más cercanos ex colaboradores, quienes, con distintos matices, sostuvieron que el ex mandatario estuvo al margen de los préstamos otorgados por Pemex al sindicato petrolero.

''Venimos a hablar de la Universidad de Yale'', alcanzó a responder Zedillo, mientras era prácticamente cercado por más de 30 reporteros, camarógrafos y fotógrafos que esperaron su llegada. El ex presidente, quien llegó al hotel Four Seasons acompañado por su esposa Nilda Patricia Velasco, debió dar media vuelta y ser llevado por su equipo de seguridad hacia una de las entradas laterales. ''No huya, no huya'', presionaba a gritos la prensa, en un fallido intento por obtener una declaración sobre el Pemexgate.

Casi una hora antes de la cita, por el vestíbulo del hotel comenzó el desfile de los ex colaboradores, muchos de ellos actualmente sin empleo en la administración pública y dedicados, principalmente, a prestar servicios de asesoría.

Luis Téllez, ex secretario de Energía y ex integrante del consejo de administración de Pemex, atajó: ''No voy a decir nada; no tengo ninguna declaración''.

Menos parco, Mariano Palacios, ex secretario de Trabajo, afirmó que la inferencia de una presunta desviación de recursos de Pemex a la pasada campaña presidencial de su partido ''tiene que ser demostrada ante los tribunales. Y por otro lado, puedo decir: me consta la honradez a toda cabalidad del señor ex presidente Zedillo en lo que se refiere a la transferencia de recursos al PRI. Durante los 20 meses que fui presidente del partido, el presidente que más permanencia tuvo durante el mandato de Zedillo, no hubo transferencia alguna de recursos del gobierno, sino solamente prerrogativas públicas ganadas con votos por la vía del IFE''.

Entre los ex funcionarios presentes estuvieron Liébano Sáenz, Carlos Ruiz Sacristán, Miguel Limón Rojas, José Antonio González Fernández, Jaime Serra Puche, Fernando Lerdo de Tejada, José Angel Gurría, Jesús Silva Herzog, Silvia Hernández, Esteban Moctezuma, Marco Provencio, Fernando Solís Cámara y Miguel Mancera Aguayo.

También respecto de los recursos presuntamente desviados de Pemex al PRI, Esteban Moctezuma, primer secretario de Gobernación de Zedillo y coordinador de la campaña presidencial de Francisco Labastida Ochoa, dijo escuetamente: ''Yo nunca vi ningún recurso''.

El motivo principal para la primera aparición pública de Ernesto Zedillo en la ciudad de México desde que dejó la Presidencia, en diciembre de 2000, fue el foro en el que la Universidad de Yale anunció que busca aumentar el número de estudiantes mexicanos que obtienen becas para cursar posgrados en sus aulas.

Pero como Zedillo, como uno más de sus múltiples empleos, asumirá a partir del primero de septiembre la dirección del Centro de Estudios de la Globalización de esa institución educativa, la ocasión también sirvió para que profesores de Yale abordaran el tema de la interdependencia de México con Estados Unidos.

En el mismo inicio de su intervención, dijo ''sentirse moralmente obligado'' a agradecer el hecho de que a la conferencia asistieran personas que, definió, reunían dos características: primero, que fueron en algún momento ''mis jefes'' y que, segundo, en algún momento estudiaron en Yale, institución a la que invariablemente se refería como ''nuestra universidad''.

Agradeció la presencia en el salón del profesor Saúl Trejo; de Jesús Silva Herzog, de quien dijo haber aprendido de economía y ''algunas lecciones de política''; de Jaime Serra, a quien llamó ''campeón de la negociación NAFTA'' (las siglas en inglés del Tratado de Libre Comercio), así como de Miguel Mancera Aguayo, ex director del Banco de México.

Zedillo abordó el tema de la globalización. Dijo que la interdependencia entre las naciones es la respuesta para solucionar los problemas económicos y de seguridad que actualmente se viven.

''En el mundo hay graves problemas; en México todavía existen graves y dolorosos retos que atender, señaladamente la pobreza y la desigualdad. Yo sostengo que la globalización e interdependencia no son causa de esa pobreza, sino que la globalización es parte de la solución a esos problemas.''

Aseguró que sin el fenómeno de globalización e interdependencia, que empezó a manifestarse después de la segunda Guerra Mundial, hoy habría más atraso y mayores conflictos que los que hemos conocido en la segunda parte del siglo XX. Pero admitió que ''hay muchas cosas'' que pueden hacerse mejor para ordenar este proceso; entre ellas citó reformas que se realicen con el concurso de todas las naciones para garantizar la gobernabilidad mundial, la ayuda al desarrollo, la apertura al comercio y otros cambios que ofrecen respuesta al tema central que han planteado quienes se preocupan por la globalización y ese tema es la inclusión.

''No es culpa de la globalización que unos estén incluidos en sus beneficios y otros no; que algunos no tengan las herramientas para beneficiarse de esa globalización", dijo el ex mandatario.