Proponen la intervención de rectores, autoridades educativas y legisladores

Pugnan sindicatos de universidades públicas por un sistema de jubilaciones consensuado

Rechazan idea de la ANUIES para crear un fideicomiso con aportaciones tripartitas

JOSE GALAN

Los sindicatos de trabajadores administrativos y académicos de las universidades públicas se manifestaron en favor de que el problema de los términos en que se dan las pensiones y jubilaciones, que representa 150 mil millones de pesos al año, se resuelva de manera conjunta con las autoridades educativas, así como con rectores y directores de las instituciones, mediante una agenda común que involucre también a legisladores del Congreso de la Unión.

Rechazaron la propuesta de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) que busca fijar topes similares para la edad de jubilación en unas 30 universidades; crear un esquema de fideicomisos con base en aportaciones tripartitas: trabajadores, gobiernos federal y estatales e instituciones, y eliminar la llamada pensión dinámica.

En la pasada reunión de rectores de universidades públicas organizada por la ANUIES en Ixtapan de la Sal, estado de México, fue presentado el diagnóstico de 30 universidades públicas, que en conjunto representan pensiones y jubilaciones anuales por 77 mil millones de pesos. Pero el problema abarca a unas 50 universidades, centros de investigación e instituciones públicas de todo el país, con un monto anual que llega ya a 150 mil millones de pesos.

La llamada jubilación dinámica significa que un trabajador se jubila con el ciento por ciento del salario que percibía al momento del retiro. Si un trabajador permaneció 24 años en un puesto, y en el último año fue ascendido en el escalafón, ganará en su jubilación la percepción del último año. Hay casos en que un trabajador recibe doble jubilación: por parte de la institución y por parte del sistema de seguridad social, sea IMSS o ISSSTE.

Esta es una discusión aún pendiente dentro del sindicato, afirmó Agustín García, secretario del Interior del sindicato de trabajadores de El Colegio de México, pero "es un problema que nos preocupa porque se trata de un beneficio garantizado en las leyes, pero puede llegar el día en que las instituciones no tengan fondos para pagar a sus jubilados", agregó.

Para el representante del Sutcolmex, las decisiones de rectores y directores "han marginado las opiniones de los sindicatos que, como se sabe, tenemos más de dos años trabajando en propuestas y discusiones con las diversas autoridades. Si no lo hacen, el problema crecerá".

Para otros representantes sindicales, los rectores y directores efectuaron una propuesta que, en algunos casos, significaría modificaciones importantes en los contratos colectivos de trabajo. Pero también advierten que en muchos casos la edad y monto de la jubilación no están incluidos en los contratos colectivos, sino en las legislaciones internas aprobadas por los colegios académicos, "así que no sólo es responsabilidad de los trabajadores", afirmó León Gutiérrez Navas, secretario general del sindicato de trabajadores de la Universidad Autónoma del Estado de México.

"En los contratos colectivos no están contenidos los esquemas de jubilación, sólo los de retiro", agregó. "Los esquemas de jubilación generalmente están incluidos en las leyes universitarias. Y por eso tenemos que entrarle todos al acuerdo, incluyendo la Cámara de Diputados, que debe repartir equitativamente las partidas del ramo 22, destinadas a pensiones para los estados".

Carlos Galindo, secretario de Relaciones del STUNAM, sostuvo que antes de diseñar esquemas de fideicomisos "se deben fortalecer las instituciones de seguridad social del Estado". La UNAM está bajo el régimen del ISSSTE, "pero nos preocupa que los fondos de retiro sean privatizados mediante inversiones de alto riesgo, como una forma de que el Estado se desentienda de esta conquista laboral".

Sostuvo que el esquema de fideicomisos, como los implementados en la Universidad de Guadalajara o la Autónoma de Nuevo León, "contempla que el trabajador aporte un porcentaje de su salario, mientras que el de nuevo ingreso no está considerado en ese esquema y se le contrata bajo otro modelo de seguridad social. Se trata de un modelo bipartita".

Las pensiones y jubilaciones "es un problema que nos preocupa profundamente. Ya desde hace dos años hemos alertado tanto a autoridades como a directores y rectores. Lo que se requiere es la conformación de una agenda conjunta. Tenemos que entrar todos al acuerdo. Si hay decisiones unilaterales, sólo se polarizarán las posiciones", alertó Gutiérrez Navas.

David Villarruel, secretario de Relaciones y Solidaridad del sindicato de trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana, reconoció que, "en efecto, se ha abusado de ciertos derechos como la pensión dinámica", pero coincidió con los otros sindicalistas en que la solución del problema "debe salir de una agenda conjunta entre todos los interesados".

Los representantes sindicales apuntaron que la agenda debe construirse con la ANUIES, las autoridades educativas federales y estatales, pero también con los legisladores y los titulares de las secretarías del Trabajo y Previsión Social y de Hacienda y Crédito Público.