Tel Aviv anuncia evacuación de Nablus y parte de Ramallah, a más tardar mañana
Jenin, sitiada pese al repliegue militar israelí
Destrozadas, unas 800 de entre 2 mil y 3 mil viviendas, afirman organismos humanitarios
REUTERS, AFP Y DPA
Jenin, 19 de abril. El ejército de Israel se retiró este viernes de la ciudad cisjordana de Jenin, tras lo cual los residentes del devastado campo de refugiados escarbaban entre los escombros en busca de los cuerpos de sus familiares muertos o desaparecidos luego de la dura ofensiva de las últimas semanas, pero el alcance de la tragedia humana se oculta entre toneladas de escombros.
El ejército se retiró pero estableció un estrecho cerco alrededor de esta ciudad autónoma cisjordana, confirmó el gobernador de Jenin, Haidar Irshaid.
Ahora la próxima ciudad a evacuar es Nablus y la mayor parte de Ramallah, de aquí al domingo, confirmó el ministro de Defensa israelí, Benjamin Ben Eliezer, quien consideró que la ofensiva israelí emprendida el 29 de marzo "ha alcanzado sus objetivos" y ahora "habrá que encontrar una salida política al conflicto con los palestinos".
Un comunicado del ejército también señaló que completó su misión en Jenin pero mantienen sus fuerzas en los alrededores de la ciudad y del campo de refugiados para evitar ataques a Israel. Pero el ejército sigue ocupando esta noche zonas urbanas autónomas cisjordanas en Belén, Nablus y Ramallah, ciudad esta última donde el presidente palestino, Yasser Arafat, sigue asediado en las ruinas de su cuartel general.
El retiro de otras ciudades palestinas ha sido pospuesto debido, según Tel Aviv, a la presencia en el cuartel general de Arafat de cinco personas sospechosas del asesinato del ministro israelí de Turismo, Rehavan Zeevi.
Aunque el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, se declaró favorable a una investigación para aclarar lo ocurrido en el campo de refugiados de Jenin, donde se desconoce con precisión el número de palestinos muertos, Israel se opuso inmediatamente a la iniciativa.
Los palestinos acusan a Israel de haber cometido una masacre en Jenin, pero los israelíes los desmienten tajantemente. Rannan Gissin, portavoz del primer ministro de Israel, Ariel Sharon, estimó que una investigación independiente "no es necesaria", porque "todas las pruebas sobre Jenin están visibles ya en todo el mundo".
Por lo pronto, tras la salida de las fuerzas israelíes, unos diez cadáveres fueron encontrados este viernes en el patio del hospital del campamento de refugiados, donde habían sido inhumados provisionalmente, en tanto que un hombre fue hallado con vida después de haber pasado diez días entre los escombros.
El responsable de los servicios de socorro de urgencia de la Media Luna Roja, Hossan Charkaui, indicó que se trató de un "verdadero rescate" en el campamento, cuyo centro fue devastado completamente por el ejército israelí. En tanto, otras personas están bloqueadas entre las ruinas o bien tienen miedo de salir.
Charkaui precisó que hasta ahora se ha logrado recuperar los cadáveres de 26 personas, entre ellas cuatro niños, dos mujeres y dos ancianos, mientras los palestinos siguen buscando con picos y palas a sus familiares muertos o desaparecidos. "Mi hijo está allí, lo sé", decía un residente sin saber si estaría vivo o muerto.
Los rescatadores se encontraban ante una compleja situación frente a familiares desesperados por encontrar a sus hijos, madres, padres, hermanos o esposos. "Somos esencialmente voluntarios. Necesitamos gente formada para la búsqueda de cadáveres tras un terremoto", señaló un socorrista.
El alcance de la tragedia humana se oculta tras unas 800 toneladas de escombros, consideró un portavoz de la Agencia de Socorros y Trabajos de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos, Rene Aquarone, quien precisó que en algunos lugares las montañas de escombros alcanzan una altura de tres pisos.
Pero además, bombas trampa, resto de material explosivo y casas a punto de derrumbarse son otros problemas a los que se enfrentan organizaciones humanitarias que comenzaron las tareas de desescombro. Unas 800 de las entre 2 mil y 3 mil viviendas del campamento han quedado totalmente destrozadas, aunque todavía es muy pronto para dar una cifra concreta, explicaron en Ginebra representantes de asociaciones humanitarias.
También consideraron que aún es muy temprano para dar cifras fiables sobre el número de víctimas mortales y de la cifra de detenidos. El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) dijo que ha tenido acceso a unos mil 300 palestinos detenidos en un campamento militar israelí, pero éstos podrían ser muchos más.
Por ahora, dijo el CICR, el principal objetivo es la reconstrucción de la infraestructura y la reunificación de las familias, pero organismos de ayuda se han quejado de que Israel les niega el acceso a la "zona militar cerrada" durante días después de que se acabaron los enfrentamientos, por lo que la comunidad internacional ha alzado su voz para que Tel Aviv permita a esos organismos el ingreso a Jenin para evaluar los daños provocados por la ofensiva militar.
En Roma, el Programa Mundial de Alimentos de la ONU anunció que comenzó hoy el envío vía aérea de 40 toneladas de galletas energéticas para ayudar a palestinos afectados por la ofensiva israelí.
El ministro del Exterior de España y actual presidente del Consejo de Ministros de la Unión Europea, Josep Piqué, declaró este viernes a medios de prensa españoles sentirse "horrorizado" ante las imágenes y los informes recibidos acerca de lo ocurrido en el campo de refugiados de Jenin.
Después de haber hablado con el secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, y con el enviado de la UE a Medio Oriente, Miguel Morantinos, Piqué abogó por una investigación "que esclarezca las dimensiones reales" de la tragedia.