Testimonios por la Internet y celular de políticos,
legisladores y estudiantes
Hay una dictadura en Venezuela; se inician persecuciones,
allanamientos y detenciones
Operó la noche del golpe
la mayor red desinformativa de los recientes tiempos
STELLA CALLONI corresponsal
Buenos Aires, 12 de abril. ''No puedo hablarte
mucho porque luego de hacerlo debo salir de aquí, donde me pueden
rastrear, como ya les ha sucedido a otros por medio de los celulares que
son nuestro único medio de comunicación'', dice casi en susurro
un periodista amigo convertido en sólo unas horas en fugitivo de
los grupos de acción de los golpistas en Venezuela, que amenazan
convertir al país en el espejo del Chile de Augusto Pinochet. El
teléfono se corta y otra vez el silencio.
''El
presidente Hugo Chávez nunca renunció. Por eso se lo llevaron
en la madrugada. El exigió que dejaran salir a los cientos y cientos
de personas atrapadas en el Palacio de Miraflores y que no les dipararan
los francotiradores de los golpistas'', dice a esta corresponsal otra voz:
un legislador que debió dejar su casa con la familia a cuestas.
''Chávez se quedó como rehén para salvar la vida de
muchos de nosotros''.
Si en la noche y la madrugada escuchábamos ya los
signos de angustia en las voces que llegaban tan lejanas por el teléfono,
hoy el dramatismo aumentaba hora con hora. Porque Venezuela es ya un país
en el aislamiento y la soledad típica de las dictaduras. Ahora sí
hay una dictadura y casas allanadas en la noche, después de que
lamentablemente muchos medios en el mundo cayeron en la trampa de reproducir
la información, nada menos que de una cadena televisiva de golpistas.
''Quiero solicitar al mundo, a la Cruz Roja Internacional,
a los organismos humanitarios, que actúen ya en Venezuela, porque
estamos viendo allanamientos violentos, persecución y hasta se habla
de ejecuciones sumarias en todo el país. Todos debimos escondernos
porque no existe garantía alguna y vemos cómo intentan transformar
a las víctimas de los golpistas en crímenes del gobierno
democrático de Chávez'', dijo el diputado Juan Barreto, que
anoche estuvo hasta la madrugada en el Palacio de Miraflores junto al presidente.
Ahora nada se sabe de él y por protección
no se le puede llamar. El rastreo de celulares es uno de los elementos
sofisticados que la Central de Inteligencia de Estados Unidos introdujo
en varios países, dijo otro legislador. Llamar al celular de un
amigo o de un político o de un periodista o simplemente de un militante
de la llamada revolución bolivariana puede significarle prisión
o muerte.
Truco mediático
El montaje periodístico había comenzado
hace mucho tiempo. ¿Cómo fue posible que tantos intelectuales
y medios fueran atrapados en la mayor red desinformativa de los últimos
tiempos?
Cuando se intentan juzgar crímenes de las dictaduras
del Cono Sur y se conocen las estrategias promovidas desde Washington en
Chile para derrocar a Salvador Allende (1973), ahora el esquema se repite
casi sin agregarle elementos novedosos. La diferencia es la facilidad con
que la mentira pasa, camina y atrapa. Perseguidos como en los mejores periodos
dictatoriales diputados, políticos, estudiantes, trabajadores deben
ampararse en refugios, después de una cantidad de allanamientos
con suma violencia.
''Me tiemblan las manos cuando escribo esto y lo único
que me provoca es gritar y llorar'', escribe una joven por la única
vía posible: Internet. ''El golpe ?dice en este día sin luz?
ha sido el producto de la manipulación de los medios de comunicación
que desde temprano llamaron a la concentración de miles de personas
de la oposición para marchar primero hasta una zona de Caracas y
luego manipuladamente hasta el palacio de gobierno para tumbar al presidente...
Simultáneamente policías de la alcaldía mayor de Caracas
(oposición) se habían situado estratégicamente en
los edificios aledaños al palacio de gobierno de Miraflores, donde
se concentraban otras miles de personas a respaldar al presidente...
''Miles de personas que bajaban de los cerros pobres,
que venían de todas partes... Al poco tiempo, sin convocatoria previa,
ya toda una gran avenida que va al Palacio de gobierno estaba llena de
gente, cuando la guardia nacional comenzó a lanzar bombas lacrimógenas
contra los que trataban de llegar.... Desde los edificios la policía
de Alfredo Peña, el alcalde mayor comenzó a disparar contra
la manifestación de apoyo civil a Chávez y contra Miraflores...
Las imágenes de muertos que se han transmitido por los canales de
televisión fueron todas de personas que estaban respaldando a Chávez.
"No se los digo por tener afecto al gobierno, se los digo
porque a mi lado pasaron muchas balas. Pude ver a los muertos siendo cargados
hacia el palacio y a decenas de heridos tratar de ser salvados de las balas
asesinas que salían de los francotiradores... Uno de los muertos
trabajaba tranquilamente en el palacio presidencial, era del departamento
de recursos humanos; otro era un muchacho recostado en un muro que cayó
de repente, con un tiro que le sacó los sesos. Otro era un guardaespalda
del vicepresidente de la república... Vi seis muertos, pero en total
fueron once contados por otros compañeros... Todos vimos a los policías
disparando contra nosotros. Todos vimos cómo murieron nuestros compañeros...
Todos vimos el miedo de ser alcanzados por una bala... lo que está
haciendo la oposición es sanguinario, es terrorista, nos están
matando.
''Amigos, ya no sabemos qué va a pasar mañana.
Por favor difundan este mensaje. Enteren al mundo de lo que nos están
haciendo. De corazón espero volver a verlos alguna vez, pero ya
no sé que va a pasar con mi vida y con la de miles de compañeros,
pero pueden matar al hombre, no a sus ideas, hasta siempre compañeros'',
escribió Verónica. Y Julio que dice en otra carta que América
debe despertarse ya, porque mañana será tarde para todos.
Esta noche pensaba escribir una nota de análisis,
pero quise recoger las voces del silencio de los perseguidos y que sean
Juan, Julio, Verónica los que hablen y digan lo que muchos medios
han callado. ''No saben el dolor que hay en los barrios pobres. ¿Y
para qué ha sido todo esto, sino para dominar, para bajar el precio
del petróleo en el mundo, para cortar la ayuda a Cuba, para volver
atrás el único proyecto de democracia que habíamos
vivido? Camino por la ruta de los miserables que habían comenzado
a tener esperanzas y hay silencio, pero también detrás de
ese silencio siento que existe un fuego que renacerá''. Es otra
voz que me llega desde lejos. Y seguramente que ningún análisis
podría reemplazar todo lo que ellas nos están diciendo.