El ingreso de capital foráneo ha afectado la labor reguladora del gobierno, asegura

Fuera de control, contenidos televisivos: Toussaint

Los dueños de los medios "sólo toman en cuenta el rating y la comercialización"

El gobierno mexicano ha perdido el control de los contenidos televisivos, aseguró la investigadora Florence Toussaint Alcaraz, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, quien advirtió que en México hay cada vez una mayor intromisión de los capitales extranjeros en este sector de la comunicación, provocada por los procesos de privatización y desregulación.

En su participación en el primer Coloquio franco-mexicano de investigadores de la comunicación argumentó que el ingreso de capital foráneo al campo de la televisión y la mundialización de los contenidos hacen prácticamente imposible que el gobierno pueda limitar la creación de contenidos.

La especialista presentó la ponencia denominada Recorrido por la programación televisiva en México, en la que lamentó que los industriales que tienen a su cargo los medios de comunicación masiva electrónicos, como la televisión, ya no tomen en cuenta la importancia de los contenidos, sino el rating y la comercialización. Ni siquiera hacen caso de las investigaciones que se llevan a cabo en diversas instituciones sobre el tema, advirtió.

Errónea separación

Incluso, dijo, se ha dado una errónea separación entre periodistas e investigadores en la televisión mexicana, y a estos últimos no se les da la oportunidad de que socialicen el conocimiento que se produce en México.

Dentro de los contenidos noticiosos, agregó, los géneros periodísticos comienzan a desaparecer, ya que las notas se relatan de manera dramatizada y son cada vez más las historias individuales las que interesan. "Los asuntos colectivos han quedado a un lado y es el individualismo lo que llama la atención del público atomizado, pues cada persona se cree una conciencia única", planteó Toussaint.

Según su información, en México se ha dado mayor peso a los programas de entretenimiento, cuyas producciones son 52.4 por ciento nacionales y 47.6 por ciento extranjeras, y además se ha preponderado la interacción con los consumidores.

En la televisión de paga, agregó, de las dos principales empresas que operan en México únicamente nueve canales son de carácter cultural y uno educativo, mientras que suman 27 de variedades, 17 de películas y 12 tanto de noticias como de deportes.

A casi una década de entrar al mercado nacional, sólo 12 por ciento de la población ha contratado los servicios de la televisión de paga, debido a cuestiones económicas, además de la preferencia por contenidos locales e identidad nacional.

En tanto, los contenidos de la televisión abierta se han vuelto "de aldea", con una perspectiva muy estrecha, donde se busca lo individual, íntimo o privado; es decir, concede mayor espacio al entretenimiento local y menos a los asuntos internacionales, por lo que tampoco se ha convertido en una mejor opción, puntualizó la especialista.

Este coloquio fue inaugurado por Fernando Pérez Correa, director de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, quien resaltó el papel de las universidades como eslabones clave en la construcción de las nuevas redes de comunicación.