La dinastía de los Linares

Uno de los juderos de quien se tiene mayor información por la peculiaridad de sus figuras, su constancia y sus aportaciones a la cartonería, considerada expresión de grotesca belleza, fue don Pedro Linares López -nacido en la ciudad de México en 1906- en el barrio de San Agustín Zoquiapa (XVI), que en la actualidad pertenece a la colonia Merced Balbuena.

Pedro Linares es descendiente de artesanos cartoneros, cuyo oficio data del siglo XVIII, cuando don Juan Bautista Linares, originario de Xochimilco, elaboró por vez primera el judas con cañuelas y hojas de totomoxtle, al que vistió con una manta para darle forma.

Pedro Linares aprendió el oficio de su abuelo, don Celso Linares, pero le imprimió creatividad y destreza particulares. Cuentan que sabía doblar y dar forma a los carrizos gruesos y duros, con los que elaboraba figuras grandes; asimismo, sabía tratar el carrizo fresco y tierno con el que daba vida a muñecos pequeños.

La cuidadosa decoración al estilo griego (línes rectas) o árabe (líneas curvas) también eran características.

De las manos del artesano brotaban representaciones de gendarmes, tintanes, personajes de la familia Burrón, El Santo, chupamirtos, mamertos, adelaidos y uno que otro político que el pueblo quería quemar.

La mayor contribución de don Pedro, quien trabajaba todo el año y cuya producción estaba regida por el calendario de las fiestas religiosas, sin duda son los alebrijes.

Don Pedro heredó este arte a sus hijos y éstos a sus nietos. Hoy sus bisnietos, entre ellos Gerardo Iván, de 13 años, se inician en el oficio con entusiasmo.

La dinastía Linares, cuyo trabajo es reconocido en el ámbito internacional, efectuará este Sábado de Gloria, como cada año, la tradicional quema de los judas a las 17 horas en Oriente 30 número 251, colonia Merced Balbuena. Todos están invitados a la verbena popular.

ANASELLA ACOSTA NIETO