El Banco Central logró bajar la cotización a 3.04 pesos por moneda estadunidense
Sigue en Argentina la "fiebre por el dólar"
Aglomeraciones en casas de cambio; "estamos devaluados como personas", dicen en Buenos Aires
AFP Y DPA
Buenos Aires, 26 de marzo. La fiebre por el dólar continuaba hoy por segundo día consecutivo en Argentina, donde miles de personas se formaron frente a bancos y casas de cambio, pero el Banco Central logró hacer bajar la cotización de la divisa estadunidense, que cerró a un promedio de 3.04 pesos luego del récord de cuatro pesos alcanzado el lunes.
Tras una apertura a 3.30 pesos para la venta en las 39 entidades que venden dólares a cuenta del Banco Central de la República Argentina (BCRA), la cotización fue bajando paulatinamente, aunque en algunas casas de cambio cerró en esa misma cantidad.
La estrategia del BCRA aplicada desde el lunes, entre otras, fue ofrecer por medio de los bancos el dólar a un precio que acompañe la operatoria mayorista. Pero el presidente de esta institución, Mario Blejer, admitió que "cuando la gente está dispuesta a pagar cualquier precio por el dólar, hay poco por hacer".
La sede central del oficial Banco Nación generó una de las filas más largas de argentinos deseosos de comprar dólares, donde la primera persona arribó la noche del lunes, 12 horas antes del horario de apertura, cuando ya eran miles las personas formadas en la puerta para cambiar sus pesos por dólares. El panorama fue similar frente a otras entidades del llamado microcentro porteño. "Como seres humanos estamos tan devaluados como el peso", dijo un joven en una de las filas, resumiendo el ánimo general.
En este contexto, los jefes de las bancadas oficialistas (peronistas) manifestaron su respaldo al presidente Eduardo Duhalde, al tiempo que desde la oposición, la centrista Unión Cívica Radical (UCR) reclamó la adopción de medidas económicas urgentes y la fijación de un tipo de cambio.
"Si al dólar no le ponemos un freno y un anclaje que tenga que ver con el interés de los argentinos y no de una elite rentista, nada tiene sentido", señaló Angel Rozas, presidente de la UCR.
A su vez, Federico Storani, jefe de la UCR en la provincia de Buenos Aires, aclaró que su partido no planteó a Duhalde instalar una nueva convertibilidad, sino un plan de contingencia en caso de que no se llegue a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
El peso argentino estuvo 11 años en paridad uno a uno con el dólar, en un sistema que muchos analistas señalaban como artificial, hasta que Duhalde lo devaluó en enero pasado, tras el estallido social que hizo renunciar a dos presidentes en diciembre.
Funcionarios del gobierno se reunieron hoy con empresarios de súper e hipermercados para solicitar que el alza del dólar no se traslade a los precios de los productos básicos. Sin embargo, el jefe de gabinete, Jorge Capitanich, ratificó que el gobierno no aplicará ningún mecanismo de control de precios. Sólo en febrero los precios en los supermercados aumentaron 10 por ciento.
Una muestra de la desesperación
Ante la posibilidad de que la escalada de precios derive en un proceso hiperinflacionario, la clase media se refugió una vez más en el dólar. Pero algunos acosados por la pobreza -que ya afecta a casi la mitad de los argentinos- optaron por sacrificar su cabellera, para venderla a una fábrica de pelucas. Todo empezó el viernes, cuando un diario de la ciudad de Rosario, a 300 kilómetros de Buenos Aires, hizo un reportaje sobre la confección de pelucas. La gente se enteró y fue al local, atraída por los 30 a 35 pesos (cerca de 10 dólares) que puede conseguir por su cabello.
"Siempre se compró el pelo, pero por los momentos que estamos viviendo la gente se volcó masivamente (a vender su cabello) para conseguir algún dinero para comer", dijo un empleado de la fábrica G.A. Pelucas. La oferta ha sido tal que, ahora, "el stock (de pelo) supera lo que nosotros estamos capacitados de confeccionar y vender".
En diciembre miles de hambrientos rosarinos buscaron comida en los supermercados, en el inicio del estallido social que dejó una treintena de muertos en todo el país.