Las estructuras económicas existentes,
mayor obstáculo, dice la red que agrupa a 600 ONG
Incumplen gobiernos metas contra la pobreza, concluye
evaluación anual de Social Watch
En 5 años México retrocedió en
diversas áreas, asegura Araceli Sandoval, del Equipo Pueblo
BLANCHE PETRICH Y ROSA ELVIRA VARGAS ENVIADAS
Monterrey,
NL, 15 de marzo. La evaluación anual que
realiza Social Watch (Control Ciudadano), una red de más de 600
ONG de 40 países que monitorean la aplicación de políticas
contra la pobreza, concluye en su informe 2002 que las metas no se cumplieron
y que en algunos casos hubo incluso retrocesos de 30 por ciento en algunos
rubros.
En la presentación de este informe, lanzado aquí
en el contexto del foro global Financiación para el Derecho al Desarrollo
Sustentable, el coordinador de esta coalición, Roberto Bissio, señala
que a juzgar por los discursos exhibidos por los gobiernos y los dirigentes
de empresas en el Foro Económico Mundial de Nueva York, en febrero
de este año, se puede concluir que "ninguna causa ni campaña
popular como esta ?la guerra contra la pobreza? gozó de tanto apoyo
moral... ni de tan pocos resultados concretos".
El lastre de la globalización
Lo que demuestra -subrayó en conferencia de prensa-
"que la globalización no reduce la pobreza". Por lo tanto, el mensaje
de Social Watch a la conferencia de jefes de Estado que inicia en tres
días en esta misma ciudad, es que ninguna de las metas de desarrollo
que se pretenden en los países pobres se lograrán con las
estructuras económicas existentes, y esto quedará asentado
en un documento que prevén firmar.
Bissio agregó que el consenso de Monterrey, resultado
de muchas negociaciones previas, resultó ser un texto vago y sin
utilidad alguna: "fue el precio a pagar para que el presidente de Estados
Unidos, George Bush, accediera a venir".
Por parte de México, Araceli Sandoval, del Equipo
Pueblo, precisó que en el caso nacional, en los cinco últimos
años se produjeron retrocesos en varias de las metas monitoreadas.
Por ejemplo, en la calificación que se hace sobre
la calidad de la alimentación de la gente (disponibilidad de calorías
y desnutrición) las estadísticas mexicanas registraron un
estancamiento. En otras metas, como la erradicación del analfabetismo
en población adulta, salud reproductiva, dotación de agua,
reducción de índices de mortandad infantil y asistencia de
género, la calificación a México es de "cierto avance".
Sin embargo, en la valoración sobre la voluntad
política para el cumplimiento de las metas, México calificó
como "de nivel bajo" en su disposición de reducir el gasto militar.
En gastos de salud no proporcionó suficientes datos y en gastos
de educación y la firma de convenios internacionales clave fue calificado
como "nivel medio".
Sobre la situación actual de la alimentación,
México comparte con países como Cuba, Arabia Saudita, Malasia,
Honduras, El Salvador, Paquistán, una calificación de "por
debajo del promedio", acusando mayores problemas que la mayoría
de las naciones latinaomericanas.
Al analizar estas cifras, Araceli Sandoval señaló
que cerca de 60 por ciento del gasto que el gobierno federal dedica supuestamente
a sus políticas sociales y de combate a la pobreza "está
maquillado" y que la administración panista "en realidad mantiene
las mismas estrategias que el gobierno del Partido Revolucionario Institucional",
que sólo en los discursos daba prioridad a los derechos sociales
de la población, pero no en la realidad.