América Latina debe responder si Colombia
le pide ayuda contra la guerrilla, dice
Tardía y dolorosa, la salida de la crisis sin
FMI: Duhalde
Reitera que dará prioridad al sector productivo
local; descarta reunirse con Bush en Monterrey
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 13 de marzo. El presidente argentino,
Eduardo Duhalde, volvió hoy a reafirmar la posición de dar
prioridad al sector productivo local para defender los intereses del país,
"como hacen otras naciones"; dijo que va a reunirse con el presidenteVicente
Fox, y dejó entender que Argentina votaría contra Cuba en
la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
En un encuentro con corresponsales de medios mexicanos
acreditados en Argentina, Duhalde sostuvo además que si el gobierno
de Colombia solicita ayuda de los países de América Latina
para resolver su conflicto, éstos deben responder al pedido, e interrogado
sobre si esto significaría una intervención en territorio
colombiano, respondió: "es una hipótesis". Incluso, recordó
que hace aproximadamente nueve años, Argentina "ayudó" a
Bogotá con el envío de aviones para el combate a "la narcoguerrilla".
El mandatario se reunió con los corresponsales
para hablar sobre su próximo viaje a México, donde participará
en el encuentro de Monterrey, en momentos en que el Fondo Monetario Internacional
(FMI) aumenta sus condiciones para apoyar a Argentina en su más
grave crisis.
Duhalde, quien pareció evitar responder a profundidad
las preguntas que se le hicieron, dijo que la posición que Argentina
lleva a Monterrey es la "postura histórica tradicional en temas
de desarrollo. Desgraciadamente, en América Latina existe una injusta
distribución de la riqueza, y esta desigualdad que se ha creado
va generando en nuestros pueblos una tensión más grande cada
día. Ligamos mucho la idea del desarrollo con un diseño más
justo de las políticas globales", señaló.
Sobre una posible reunión con el presidente George
W. Bush, Duhalde ?quien asumió el poder el primero de enero pasado,
designado por la Asamblea Legislativa? dijo que sólo se prevé
un encuentro de los mandatarios de los países que integran el Mercado
Común del Sur (Mercosur) con el presidente estadunidense, pero esa
unión ?aclaró? no lleva una posición consensuada.
En cambio, admitió la posibilidad de reuniones
con José María Aznar, presidente del gobierno de España
(uno de los países que más invierten en Argentina); con el
mandatario francés, Jacques Chirac, y con el presidente del FMI,
Hoerst Köller.
Respecto a la situación con el Fondo Monetario
Internacional, dijo que Argentina mantiene su posición en favor
de la defensa de los intereses productivos, y que el organismo pide ahora
aumento de impuestos, pero que esa no es la posición del gobierno.
Sin embargo, siguió mostrándose conciliador
hacia el fondo, cuya misión monitorea la situación del país
para decidir si acude en su ayuda o no. En este sentido, habló de
retomar las negociaciones sobre la deuda, cuyo pago está suspendido.
Argentina, reiteró, "va a salir adelante más tempranamente
si existe apoyo del FMI, o más tardía y dolorosamente si
debe hacerlo sola", pero este último caso, aclaró, no implicaría
un enfrentamiento con los organismos financieros.
La cautela de Duhalde se registra en momentos en que se
menciona la existencia de un informe enviado por la embajada estadunidense
al Departamento de Estado, en el cual augura un final poco feliz para este
gobierno de transición. Esta versión coincide con una nueva
ofensiva de diversos sectores sobre la inestabilidad de su gestión,
lo que provocó que se disparara el dólar, que ayer alcanzó
los 2.50 pesos.
No se les puede prestar dinero porque se lo llevan
a Miami: Dornbusch
También se dan dado expresiones muy duras respecto
a Argentina de Otto Reich, secretario Adjunto para Asuntos Hemisféricos
del Departamento de Estado, lo que se une a nuevos dichos del economista
Rudiger Dornbusch, quien sostuvo en una entrevista aquí que no se
puede prestar dinero a Argentina, ya que "Duhalde y los empresarios locales
se lo traen a Miami".
Sobre esta situación, Clarín estimó
recientemente que el gobierno busca ahora sacar rédito de sus relaciones
con Estados Unidos, y el canciller Carlos Ruckauf, dice el diario, "está
convencido de la necesidad de un alineamiento sin fisuras" con Washington.
Ya el embajador argentino en Washington, Diego Guelar,
había adelantado el voto negativo contra La Habana. "Hay que condenar
a Cuba por violaciones a los derechos humanos. Y los que se oponen con
argumentos de izquierda es porque nunca combatieron contra las dictaduras
en Argentina", ha dicho Guelar, quien fuera funcionario de Carlos Menem,
el gran rival de Duhalde en el Partido Justicialista (peronista).
El tema de Cuba fue parte de las interrogantes del encuentro
de hoy. Pero el presidente evitó dar una respuesta directa, limitándose
a establecer una diferencia en la consideración sobre el tema de
derechos humanos en los países socialistas ?referido a las garantías
individuales básicas, como salud y educación? y la visión
de "nuestras naciones" sobre el derecho a la libre expresión y movilización
que, sostuvo, no se cumple en el socialismo.
Votará contra Cuba en la ONU
Además, sostuvo que él siempre se manifestó
en favor de la posición de Menem y de su sucesor Fernando de la
Rúa, de condenar a Cuba en el ámbito de los derechos humanos.
En relación con México, Duhalde dijo que
pensaba avanzar en el ámbito de acuerdos sobre automotores, por
considerar al país el eslabón "más cercano a nosostros
en idiosincrasia" en el marco del futuro del ALCA.
"Me siento muy apoyado por todos los gobiernos latinoamericanos",
añadió el mandatario, quien también dijo haber recibido
nuevas señales de Europa. Y al negar que Argentina vaya a afrontar
a los organismos financieros internacionales, sostuvo que esa versión
"es una tontería. De ninguna manera pensamos que la salida sea ésa.
Pero sabemos que es mucho más fácil salir de un problema
si se tiene ayuda".
Admitió así que en las negociaciones con
estos organismos se cruzan los temas de "la geopolítica", aunque
negó presiones, que diversos analistas han señalado en estos
días y que han acercado las posiciones hacia Washington a los tiempos
de "las relaciones carnales" que inauguró Menem. La posición
argentina ante los temas de Colombia y Cuba no son comunes a otros países
latinoamericanos, aun cuando los argentinos se oponen a ambas decisiones
de política exterior. Lo que no es poco en un país en virtual
rebelión social.