Denuncian ingobernabilidad y agravios contra el pueblo

Marchan mil personas para exigir la destitución del alcalde de Tultitlán

SILVIA CHAVEZ GONZALEZ CORRESPONSAL

Tultitlan, Mex., 1Ɔ de marzo. Alrededor de mil personas, entre vecinos, líderes, diputados y militantes de PRI, PRD y PAN, efectuaron dos marchas que partieron de la Vía José López Portillo hacia la presidencia municipal de esta localidad -donde suspendieron las actividades- para exigir al gobernador Arturo Montiel Rojas la destitución del alcalde-actor José Antonio Ríos Granados.

El primer grupo de 500 personas, entre militantes priístas y ex alcaldes que gobernaron esta localidad, partió al filo de las tres de la tarde, y con mantas exigían la destitución del edil-actor. De municipios como Cuautitlán Izcalli y Coacalco, arribaron vehículos que traían militantes panistas, y durante el trayecto al palacio municipal quemaron cohetones, algunos de los cuales se incendiaron accidentalmente en el interior de una camioneta sin que se reportaran lesionados.

Minutos después el segundo contingente partió del mismo punto. Encabezados por militantes de Acción Nacional y dirigentes municipales del PRD y del Movimiento Ciudadano, también exigían la destitución de Ríos Granados.

Martín Roque, dirigente local del sol azteca, aseguró que en Tultitlán existe ingobernabilidad, y que desde hace una semana las oficinas de Tesorería y del organismo de agua están embargadas, debido a que ex trabajadores demandaron a la administración tultitlense por su despido injustificado, y ante la falta de pago de liquidaciones, optaron por promover juicios de embargo.

Asimismo, señaló que el alcalde ha utilizado a su secretario particular, Francisco Santos Arreola, como instrumento de intimidación. Sostuvo que la lista de agravios hacia el pueblo tultitlense son demasiados, entre ellos el hecho de que un hijo del alcalde hace un año hubiera sido detenido como presunto robacoches.