REGRESO A LA CIVILIZACION
Con el fondo musical de un maestro, Ilija Panincic recibe un corte de pelo de un empleado de la OTAN en Bosnia que forma parte de las fuerzas de paz en la remota cordillera de Sipovo. Panincic, un pastor de unos 50 años con dificultades para comunicarse, fue hallado por un grupo de exploradores. Permaneció aislado durante años y no sabía que la guerra en los Balcanes terminó hace seis años. El campesino compartía su tiempo con un oso que lo visitaba regularmente y rascaba su puerta FOTO REUTERS