Martes 19 de febrero de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
Invasión en San Jerónimo Caleras
En la madrugada de este lunes unas 150 familias provenientes de colonias del sur de la ciudad de Puebla, y al parecer militantes de un partido político, invadieron 40 hectáreas de un predio privado en el paraje Loma Bonita de la junta auxiliar de San Jerónimo Caleras. Los dueños de esa propiedad ya habrían interpuesto una denuncia penal por el despojo de esta propiedad.
Nuevamente estamos frente a un caso de impunidad de organizaciones de invasores de tierra que engañan a la gente que se adueña de los predios con la falsa versión de que la ocupación es legal o que se cuenta con la venia de las autoridades civiles. Al final, éstas agrupaciones obtienen cuantiosas ganancias por la venta ilegal de lotes, los nuevos moradores construyen viviendas en condiciones precarias, aumentan las zonas de la ciudad que están al margen del desarrollo urbano y los dueños de los terrenos quedan en estado de indefensión.
Esto es resultado de la corrupción que priva en diferentes áreas del gobierno estatal y municipal que son las encargadas de regular y planear el desarrollo urbano, y de procurar la impartición de la justicia. La impasividad de las autoridades en contra de las invasiones es una situación que atenta contra el régimen de propiedad privada y en general contra el Estado de derecho.
Pero también este problema pone de manifiesto la ausencia de políticas suficientes del Estado para garantizar el derecho constitucional de que todo mexicano debe gozar de una vivienda digna. Los asalariados y la población con los más bajos ingresos en la actualidad no tienen la oportunidad de poder adquirir una casa de interés social y mucho menos hay reservas territoriales para que construyan sus moradas, por eso, su única oportunidad de contar con un espacio para vivir es sumándose a las redes ilegales de invasión de tierras.