Que el Estado reconozca que violaron sus garantías,
la meta
Llevarán a la CIDH el caso de Paulina, a quien
se le negó su derecho a abortar
JORGE ALBERTO CORNEJO CORRESPONSAL
Tijuana, BC., 14 de febrero. El caso de Paulina
del Carmen Ramírez Jacinto ?la menor que fue violada y a quien las
autoridades de Baja California le negaron su derecho al aborto? será
presentado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Ante esa instancia, con sede en Costa Rica, activistas
de México y Estados Unidos denunciarán que la autoridad transgredió
los derechos reproductivos establecidos en tratados internacionales firmados
por México y que se carece de reglamentación para el aborto
en caso de violación, además promoverán la aplicación
de la pastilla para la anticoncepción de emergencia y la indemnización
de la víctima.
La abogada Mónica Roa, del programa para América
Latina y el Caribe del Centro Legal para Derechos Reproductivos y Políticas
Públicas (Crlp), dijo al diario La Crónica, de Mexicali,
que en el caso de Paulina sus derechos reproductivos fueron violados.
En 1999 la menor fue violada en su hogar y como consecuencia
de ello resultó preñada; intentó interrumpir el embarazo,
como lo permite la Constitución estatal, pero las autoridades se
lo impidieron, según consta en la relatoría de la recomendación
de la Procuraduría Estatal de los Derechos Humanos.
Presentarán el expediente el 8 de marzo
Roa informó que el expediente será presentado
el 8 de marzo por el Crlp, organización no gubernamental que promueve
el avance y la protección de los derechos reproductivos como garantías
individuales de las mujeres.
"Queremos que el Estado mexicano reconozca la responsabilidad
internacional de la violación de los derechos de Paulina, así
como los contenidos en los tratados internacionales en la materia", expuso
la abogada con residencia en Estados Unidos.
Buscamos, agregó, "que exista esa reglamentación
para que jueces, funcionarios, personal del Ministerio Público,
de la policía y de los hospitales públicos sepan qué
hacer cuando se presenten estos casos, no tengan un margen de acción
y no empiecen a actuar con creencias personales, políticas y religiosas",
expuso.
Es la primera vez que un caso como éste se lleva
a la CIDH, por lo que los activistas buscan sentar un precedente en América
Latina.