Ť En el Superdomo uno estará más
seguro que en casa: comisionado de la NFL
Tres ex mandatarios presenciarán el Supertazón
Ť Los aficionados deberán llegar 5 horas antes
del juego para someterse a revisiones
Nueva Orleans, 2 de febrero. La
sombra de los atentados del 11 de septiembre cubre toda la ciudad de Nueva
Orleans y la ciudad está bajo extremas medidas de seguridad en la
víspera del Supertazón que, en su edición 36, tendrá
como invitados especiales a tres ex mandatarios de Estados Unidos, incluyendo
a George Bush, en representación de su hijo, el actual presidente,
quien no asistirá al juego.
La capital del jazz, famosa por el Carnaval y su comida
de origen francés, fue tomada desde hace casi un mes por
fuerzas de seguridad de todo tipo, desde agentes de los servicios secretos
hasta miembros de agencias de detectives privados contratados para vigilar
la ciudad.
"Es el evento más seguro del mundo. Uno estará
más protegido que en la sala de su casa'', dijo Paul Tagliabue,
comisionado de la NFL.
Se estima que poco más de 72 mil personas compraron
boletos para el esperado juego y la última entrada se vendió
en taquilla hace 15 días en 400 dólares.
Los organizadores del evento en el que San Luis y Nueva
Inglaterra disputarán el título, construyeron un cerco de
concreto de casi dos metros de altura alrededor del Superdomo para garantizar
la seguridad de los espectadores que colmarán el estadio.
A los asistentes se les ha pedido que acudan al estadio
con cinco horas de anticipación para someterse a la revisión
individualizada, en la que los guardias utilizarán aparatos de rayos
X y detectores de metales en la única puerta de ingreso. Se prohibió
llevar hieleras, lentes de cámara fotográfica, paraguas,
balones de playa y cochecitos de bebé.
También se dieron órdenes para que aviones
comerciales no puedan sobrevolar el espacio aéreo cercano al estadio
horas antes del partido y durante el choque.
La trascendencia del Supertazón capturará
la atención internacional con millones de telespectadores que lo
seguirán en directo al menos en medio centenar de naciones, mientras
que 130 millones de aficionados lo harán en Estados Unidos.
La cadena Fox, que se adjudicó los derechos de
trasmisión por televisión, dedicará una programación
de cinco horas este domingo, que incluirá tres horas de espectáculo
previo, en tanto que el grupo de rock irlandés U2 cantará
en vivo en el mediotiempo, en un escenario que se armará y desmontará
en diez minutos.
Los organizadores esperan romper un récord del
Libro Guinnes, si logran superar los 87 mil espectadores que en
1981 se reunieron en el Superdomo de Louisiana para el concierto de los
Rolling Stones. AGENCIAS