Ť Exigen vecinos instalar en el lugar la casa
de cultura
Usan como antro un edificio histórico
en San José Insurgentes
ANGEL BOLAÑOS SANCHEZ
Con una manta en la que se acusa al delegado en Benito
Juárez, José Espina von Roehrich, de cerrar escuelas para
abrir antros, colgada en la puerta del viejo edificio de la subestación
eléctrica de tranvías del Distrito Federal, catalogado por
el INBA como patrimonio cultural por su valor arquitectónico, vecinos
de la colonia San José Insurgentes protestaron ayer por la reapertura
del inmueble como restaurante bar e hicieron huir a los valet parking
y al recepcionista, quienes desde antes del mediodía se encontraban
en sus puestos para iniciar labores.
Ubicado en el número 5 de la calle Félix
Parra, casi esquina con avenida Río Mixcoac, el inmueble tiene ya
colocado un anuncio luminoso rojo con el nombre del negocio: Rouge. Según
la ficha de la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos,
pertenece al gobierno del Distrito Federal.
Refieren los vecinos que fue abierto como restaurante
bar durante la administración de la delegada panista Esperanza Gómez
Mont, ignorando las protestas de los habitantes de la zona, y durante la
gestión de Ricardo Pascoe, tras el incendio de la discoteca Lobohombo
a finales de 2000, fue cerrado por no contar con las medidas de seguridad
adecuadas.
Este sábado se pretendía reabrir, explicaron
los vecinos, luego de ser cedido en comodato (préstamo gratuito)
por un particular cuya identidad desconocen, pues las autoridades de la
delegación aseguran que no encuentran la documentación correspondiente.
Una de las manifestantes, Ana Luisa León, dijo
que cuando Gómez Mont estaba al frente de la demarcación,
les dijo que "estaba atada de manos porque el negocio era del hijo de un
alto funcionario en ese momento".
Explicaron que además de los inconvenientes del
escándalo y la saturación de vehículos, en la misma
calle hay cinco escuelas, desde nivel prescolar hasta preparatoria, como
el plantel del Instituto Simón Bolívar, por lo que exigieron
que el inmueble se utilice para fines educativos. "Solicitamos que en ese
lugar se instale la Casa de la Cultura de la colonia San José Insurgentes
y áreas aledañas".
"Preservemos nuestra historia", era la consigna en otra
de las mantas usadas en la protesta. La ficha del INBA refiere que el edificio
fue construido por la compañía de tranvías eléctricos
de México, con muros de tabique y viguetas, cubierta de estructura
metálica y lámina de zinc, inclinada a dos aguas.