Inmobiliarias adquieren de forma ilegal terrenos vecinos a San Salvador Atenco

Ť Ejidatarios de Nexquipayac colocan barricadas ante amenazas del gobierno estatal

JAVIER SALINAS CESAREO Y RENE RAMON ALVARADO CORRESPONSALES

Tezoyuca, Mex., 25 de enero. Más de 100 hectáreas del ejido Tequisistlán, perteneciente al municipio de Tezoyuca y colindante con los terrenos de San Salvador Atenco expropiados por el gobierno federal para la construcción del nuevo aeropuerto, han sido vendidas de manera "anárquica e irregular" por los ejidatarios de ese núcleo.

Al denunciar lo anterior, Maximiliano Fidel Peralta Delgadillo, alcalde de Tezoyuca -municipio que comparte más de tres kilómetros de colindancia con Atenco-, añadió que detrás de algunas asociaciones civiles que han comprado los predios podrían estar inmobiliarias que construirían zonas habitacionales en el área.

Señaló que ante la venta ilegal de tierra, el cabildo determinó no otorgar permisos para construir en el municipio o para subdividir los terrenos.

Explicó que de las 350 hectáreas que conforman el ejido de Tequisistlán, 100 hectáreas colindantes con el ejido de Santa Isabel Ixtapa de San Salvador Atenco, zona expropiada para la construcción de la terminal aérea, fueron vendidas por los ejidatarios.

"Desde antes que se diera a conocer el lugar de construcción del nuevo aeropuerto, los terrenos de Tequisistlán ha sido muy codiciados por estar cercanos a lo que sería el proyecto aeroportuario."

Denunció que los ejidos han sido comprados por algunas asociaciones civiles provenientes principalmente de los municipios de Ecatepec, Cuautitlán, Tultitlán, Chimalhuacán y Chalco, detrás de las cuales se ha detectado inmobiliarias, cuyos nombres se reservó. Se cree que esas organizaciones utilizarían los terrenos para revenderlos a precio muy alto y construir zonas habitacionales. Algunas hectáreas ya han sido ocupadas de manera irregular.

Apuntó que en coordinación con los comisariados ejidales se han colocado mantas, carteles y algunas pintas en el ejido de Tequisistlán informando a la población que no se deje sorprender y se abstenga de vender o comprar los terrenos en zona ejidal.

Asimismo, el alcalde informó que la próxima semana el municipio de Tezoyuca dará respuesta a la solicitud de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de explicar, "como tercer afectado", los perjuicios que traería la construcción del nuevo aeropuerto en la zona de Texcoco. Adelantó que su respuesta irá en el sentido de alegar que este municipio, al igual que los vecinos, no está capacitado ni en condiciones de recibir una obra de tal magnitud, además de los daños que causará ésta.

Campesinos en la subprocuraduría

En tanto, una comisión de campesinos de San Salvador Atenco que se oponen a la venta de sus tierras para la construcción del nuevo aeropuerto acudió a la subprocuraduría de Justicia, con sede en Texcoco, en apoyo a algunos de sus compañeros que se presentaron para testificar ante el Ministerio Público (MP) sobre las agresiones sufridas el pasado 14 de enero a manos de un grupo de "golpeadores" encabezado por la esposa del alcalde y presidenta del DIF municipal de Atenco, María Pastené.

Sin la presencia de sus líderes, los labriegos presentaron ante el MP a tres de sus compañeros testigos de la agresión y lesiones que sufrió la familia Brugada Ponce.

La comisión de campesinos llegó a la subprocuraduría en medio de una presencia "extraordinaria" de policías judiciales. Exigió el cese del acoso policiaco y que se aplique la ley contra los "golpeadores" y familiares del alcalde que "buscan desestabilizar el movimiento", según dijeron.

Antes, importantes jefes policiacos de la procuraduría mexiquense se reunieron a puerta cerrada con judiciales de la zona.

Por la tarde, los campesinos regresaron a la subprocuraduría para presionar a los apoderados legales y dueños de la empresa Carrocerías Altamirano a pagar una indemnización a la familia Ramos Romero, ya que por la mañana la niña Alizet, de dos años, murió al ser atropellada por un tractocamión de dicha factoría localizada en San Salvador Atenco.

La niña y su madre, Maribel Romero, iban en bicicleta de la cabecera municipal al poblado de Acuexcomac y fueron atropelladas en la calle Nacional por el tractocamión con placas KR64244, conducido por Cresencio Andrade Carrión, quien se encuentra detenido.

Los campesinos se solidarizaron con la familia y presionaron para que los dueños de la empresa se hicieran responsables de los gastos funerarios e indemnización familiar, ya que los empresarios querían deslindarse del asunto ofreciendo 10 mil pesos a la familia.

En Nexquipayac, los ejidatarios colocaron barricadas en tres de las entradas al poblado.

En asamblea se decidió cerrar los accesos en respuesta a las amenazas del gobierno estatal de detener a los dirigentes y para demostrar al gobernador Arturo Montiel que ninguno de los ejidos ha negociado la venta de las tierras, como ha declarado el gobernante de manera reiterada.