Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Martes 15 de enero de 2002
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Espectáculos
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Ť "Este negocio es bastante resistente a las crisis económicas", dice Alejandro Ramírez

Más de 4 mil 600 mdp captaron las salas de cine en México durante 2001

Ť Se vendieron 89 millones de boletos; este año el propósito es aumentar la cifra en 10 millones
Ť Los ingresos son equiparables al actual presupuesto que ejercerá el CNCA en 2002

JORGE CABALLERO

En 2001 las cadenas de cine vendieron aproximadamente 89 millones de boletos para entrar a ver películas en las dos mil salas del territorio nacional; tomando en cuenta un promedio de 35 pesos por localidad, la derrama económica fue de unos 3 mil 115 millones de pesos; si a esta cifra le sumamos el dinero de las palomitas y chuchulucos, que se estima en 50 por ciento respecto del gasto de la taquilla, mil 557 millones 500 mil pesos, el total es de 4 mil 672 millones 500 mil pesos, aproximadamente.

Lo que significa que la desaceleración económica mundial no ha afectado la exhibición de cine en nuestro país, lo cual se confirma con la declaración del ejecutivo de Organización Ramírez Cinemas, Alejandro Ramírez: "Este negocio es bastante resistente a las crisis económicas. No nos ha afectado; la exhibición es más sensible a las buenas o malas películas. La gente continúa asistiendo porque necesita entretenimiento".

Respecto de 2000, el año 2001 registró un aumento de 8 millones más de boletos vendidos; este año la exhibición de cine en nuestro país proyecta cerrar el año vendiendo 10 millones de localidades más como mínimo, lo que coloca al séptimo arte como el principal entretenimiento de los mexicanos en relación con el resto de espectáculos, como circo, teatro y conciertos musicales de todo tipo de géneros.

Las dos principales empresas de entretenimiento en México, CIE (RAC y OCESA) y En Vivo (Grupo Televisa), convocaron a 2 millones 465 mil 441 personas en el territorio nacional. RAC sumó un millón 744 mil 400 espectadores; OCESA, en cien conciertos, reunió 883 mil 575 personas en 5 foros distintos del Distrito Federal, principalmente; la empresa En Vivo, que comenzó actividades a mitad del año pasado, reunió un público de 181 mil 866, en 30 actos y en tres foros.

En la República Mexicana hay, en promedio, dos mil salas de cine; en orden de participación a nivel nacional las cadenas más importantes son: Organización Ramírez Cinemas (45 por ciento del mercado), la empresa cinematográfica más grande e importante de Latinoamérica con 30 años en el mercado que abrió su primera sala en la ciudad de Morelia, el Cine Morelos, en el año de 1947; actualmente cuenta con 55 complejos Cinépolis, 41 Multicinemas, 28 Gemelos y 6 Cinemas; un total de 835 salas y 198 mil butacas. En segundo lugar Cinemex, que opera únicamente en el Valle de México (25 por ciento del mercado), cuenta con 325 pantallas y suma 67 mil 784 butacas; es la cadena más importante en el Distrito Federal (52 por ciento del mercado). El tercer sitio lo ocupa la cadena estadunidense Cinemark (14 por ciento del mercado) con 26 complejos, 256 salas y 60 mil butacas; esta cadena es la segunda en importancia a nivel mundial y tiene presencia en Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Honduras, Nicaragua y Perú.

Popular y accesible

Según los estudios de Organización Ramírez Cinemas, el cine sigue siendo un entretenimiento popular y accesible para todas las clases sociales; los precios de taquilla, que van de 30 a 65 pesos, dependiendo el día y complejo, siguen siendo más bajos que en el resto del continente y del mundo por el carácter popular y de diversión del cine en México, que por muchos años estuvo dentro de la canasta básica.

Además de la exhibición de películas los complejos cinematográficos se han modernizado y han ampliado sus servicios, por ejemplo Organización Ramírez Cinemas en sus salas normales ofrece cafetería, cinecafé, dulcería tradicional, dulcería a granel, módulo de atención a clientes, taquilla automatizada, área de videojuegos y estacionamiento; en sus salas denominadas VIP hay butacas forradas con piel tipo reposet con descansa pies, servicio de mesero, cinebar, barra de sushi, venta y reservación de boletos por teléfono e internet, sonido digital y certificación THX, macropantallas y omnipantallas (para la exhibición de películas en formato de 70 mm), el programa Cinéfilo Frecuente (de recompensas para clientes), revista gratuita, guardería infantil, cybercafé, crepería, palomitas light y de caramelo.

Por su parte, Cinemex cuenta con servicio de guardias de seguridad las 24 horas, los 365 días, ambulancias de terapia intensiva, sistema de alarmas contra robo e incendio, planta de energía eléctrica, capacita a todo el personal periódicamente en cursos de protección civil, correo electrónico, chat, las cinetrivias para ganar pases, líneas telefónicas para conocer los horarios de las películas, reservar y comprar boletos para cualquier función con una sola llamada, reservación y compra de boletos por internet para todos sus complejos, en tiempo real y sin la intervención de operadores.

Cinemark ofrece: sonido digital, butacas reclinables, pantallas virtuales que combinan elementos multimedia (sólo en sus complejos de Parque Duraznos y Centro Nacional de las Artes), renta para la organización de conferencias, talleres, cursos y demostraciones.

Planes para 2002

Este año la exhibición de cine en nuestro país pretende un crecimiento mínimo de 10 millones más de espectadores: Organización Ramírez planea abrir 11 complejos, 9 se en ciudades como: Distrito Federal, Estado de México, Chihuahua y Villahermosa; los dos restantes en Guatemala y Panamá. Cinemex planea construir cuatro complejos en esta ciudad: Coapa, Coacalco, Misterios (La Villa) y El Rosario, y Cinemark proyecta tres complejos más, aún sin definir las sedes.

En promedio cada complejo proporciona empleo directo de 80 a cien personas; juntas las tres exhibidoras dan empleo a unas 10 mil personas: Organización Ramírez Cinemas, 5 mil; Cinemex a más de 2 mil 500 y Cinemark a más de 2 mil mexicanos.

La derrama económica en las salas cinematográficas sólo es comparable al presupuesto de 2002 asignado al Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA) de 4 mil 200 millones de pesos; casi 3 veces más que el de la Secretaría de Turismo, mil 597 millones; equiparable a los ingresos programados por el nuevo gravamen a las bebidas alcohólicas, 3 mil 183 millones 600 mil pesos, y tres veces mayor al de agua, refrescos y sus concentrados, mil 374 millones.

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