CINE

Desde el Yara/III

Ť Gerardo Arreola

La Habana, 6 de diciembre. Así como la nota roja brincó de los rincones a las primeras planas de los periódicos, las portadas de las revistas y los flashes informativos de radio y televisión en la última década, el cine latinoamericano parece estar dirigiendo sus reflectores hacia el vasto mundo del delito.

LO MAS PROBABLE es que la irrupción de este subgénero no sea propiamente un objetivo en sí mismo, sino un punto de partida o hasta un pretexto para que los realizadores incursionen en otros terrenos de su interés, argumentales, plásticos, discursivos.

ALGO YA CONOCIDO en la materia para los cinéfilos mexicanos son dos cintas de reciente estreno en su plaza de origen, De la calle (Gerardo Tort) y Perfume de violetas (Marisa Sistach).

AMBAS DAN EL tono de lo que se está viendo en La Habana en estos días: no son cine negro, propiamente, pero el hampa en alguna de sus expresiones, desde el raterillo incipiente y el pandillero cómplice de violación, hasta los negocios de la policía, surgidos literalmente de las cañerías, son el impulso para trazar líneas argumentales.

YA SE TENIA noticia también aquí de Taxi para tres, la exitosa realización del chileno Orlando Lubbert, que cuenta la microhistoria de dos hampones de baja monta, como eje de una narración sobre los claroscuros de la sociedad.

DE ALGUNA FORMA este es también el esquema de En la puta vida, cinta de Beatriz Flores Silva, que llega al festival de La Habana con los honores del Huevo de Oro de Huelva y el Premio del Jurado de Trieste, más la postulación al Oscar como la mejor película extranjera.

ESTA PELICULA TIENE antes que nada la virtud de pasar lista de presencia de una cinematografía deprimida. Ahora, dice la directora, la cinta es la más taquillera de este año en Uruguay.

COMO MUCHAS DE esta afiliación, la obra de Beatriz Silva se basa en un hecho real. Una joven madre uruguaya quiere hacerse del dinero necesario para vivir más o menos. Termina en Barcelona en una red de prostitución europea.

LA HISTORIA EN sí misma no tiene mayores novedades. Desde Santa, La mujer del puerto o Salón México, hace décadas que esta historia da vueltas en redondo.

LA CINTA URUGUAYA incorpora al argumento el delito internacional, como tiene que ser en una narración del mundo global, y por ello se emparenta con las antes citadas, en la revista del hampa en todas sus gradaciones.

OTROS TITULOS DE estreno anunciado para el resto de la semana también parecen formar filas en esta tendencia.

SE ANUNCIO LA integración del jurado que en este Festival entrega un premio por cuenta de la Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica (Fipresci), como parte de la sección oficial del certamen: Umberto Rossi (Italia), Rodolfo Santovenia (Cuba), Irit Shamgar (Israel), Gustavo Iribarne (Uruguay) y Luz María Virgen Aguilar (México).

UN CLIMA ATROZ, con viento, chubascos y frío, castiga a los cinéfilos cubanos, que forman largas filas para cada función del Festival.