JUEVES Ť 29 Ť NOVIEMBRE Ť 2001
Ť Los apoyos apenas han cubierto 4.6% del sector, reconoce el subsecretario de Economía
No hay tiempo ni dinero para atender a todas las pequeñas empresas: Bueno
Ť Dramática, la mortandad de compañías; de cada 200 mil, 65% cierra en dos años, afirma
Ť Lo importante es dar la impresión a inversionistas extranjeros de que las cosas se hacen bien
HUMBERTO ORTIZ MORENO
No hay tiempo, dinero ni personal para atender al universo de 2 millones 885 mil pequeñas y medianas empresas del país, confesó Juan Bueno Torio, subsecretario del ramo en la Secretaría de Economía, y dijo que lo importante es dar la impresión entre los inversionistas del exterior de que ''las cosas se hacen bien''.
Pese a las grandes expectativas abiertas desde la campaña presidencial foxista, aceptó, los apoyos apenas han cubierto 4.6 por ciento de ese sector. Pero aún así, se dice satisfecho. šQué quieren que haga!'', exclamó y reconoció que en este gobierno ''la confianza no está toda ganada, porque traemos muchos años de descuidos''.
El diagnóstico sobre la mortandad de empresas en México es ''dramático'': de cada 200 mil factorías que nacen, 65 por ciento cierra en el curso de dos años, y la tendencia sigue vigente.
Cero recursos para programas nuevos
Pese a lo anterior, Bueno prevé un recorte de 25 a 30 por ciento en el presupuesto de 850 millones para su gestión en 2002, a fin de reasignarlo en otras áreas de Economía, con lo que los nuevos programas tendrán cero recursos. Al menos se necesita el doble para apuntalar al aparato productivo de menor tamaño.
''El gobierno está haciendo lo correcto al mantener las variables macroeconómicas estables y permitir un ambiente favorable para que las empresas puedan desarrollarse; estamos haciendo el trabajo bien'', expresó Bueno Torio y aseguró no sentirse frustrado. ''Así son las reglas del juego en este momento y no nos podemos sentar a lamentar si hay dinero o no hay dinero'', apuntó.
En rueda de prensa y luego en entrevista, el funcionario aclaró que el gobierno foxista fue electo para seis años y carga con mucho tiempo de ''una forma de hacer las cosas que llevó al país a la condición en que está''. Las autoridades, añadió, han planteado la necesidad de mejorar sus finanzas públicas, pero no ha podido lograrse por el periodo de transición ''en donde todas las fuerzas políticas se están acomodando en el contexto general del país y al interior de ellas mismas''.
Bueno Torio juzgó que se vive una fase de transición en la que ''todos tenemos que aprender a cogobernar'', y urge acelerar las reformas estructurales, pero ''eso no lo hace Fox solo...''.
Hay cosas, agregó, que ''ojalá las pudiéramos cambiar de un plumazo, como antes, por decreto presidencial, pero no es así y estoy feliz de eso, muy tranquilo de que las cosas se discutan en el Congreso aunque la reforma fiscal ya lleve 10 meses. Pero es la realidad del país''.
Mencionó que existen 80 mil millones de pesos disponibles para las pequeñas y medianas empresas, pero muchas veces no son tomados porque no hay mercado; ''la confianza no está toda ganada y las circunstancias no están dadas en las empresas''.
Bueno Torio dice estar esperando la aprobación de la reforma fiscal para contar con los recursos suficientes para respaldar al sector; de lo contrario, si el propósito es atender 200 mil empresas en 2002, entonces solamente podrá apoyarse a 130 o 140 mil, o sea, casi el mismo número que durante 2001.
El subsecretario puntualizó que, en medio de la desaceleración económica, hay dos tipos de industria: la que ha crecido y otra que ''ha venido a menos''.
Es decir, existen factorías que le han apostado mucho al desarrollo, a la innovación tecnológica, al valor agregado, y están las que ''desafortunadamente'', por las circunstancias del desarrollo económico, ''se han quedado en las producciones primarias, sin innovación tecnológica...''.
Ahí está el reto, concluyó, pero por lo pronto ''ni tenemos toda la gente ni hemos tenido todo el tiempo, ni tenemos todos los recursos para poderlas apuntalar a todas de un día para otro''.