JUEVES Ť 29 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť Consideraron que los derechos agrarios están en el olvido

La tierra de los labriegos debe pagarse con un sobrevalor: expertos

PATRICIA MUÑOZ RIOS

En América Latina persiste un alarmante atraso en el respeto a los derechos agrarios de los campesinos, afirmó en entrevista Antonio Boainain, investigador, catedrático y promotor del programa Tierra para todos en Brasil. En tanto, la directora adjunta subregional de la Cepal en México, Margarita Flores, indicó que "aún no se logra la compatibilidad entre las garantías de los trabajadores del campo y el desarrollo sostenible".

Los especialistas hablaron ayer sobre los derechos de los campesinos, expropiaciones y el mercado de tierras en AL.

Boainain indicó que una de las principales violaciones a los derechos agrarios en la región son los precios que se pagan por sus tierras a los propietarios rurales o ejidales, ya que no se les reconoce el valor comercial de sus propiedades, como al parecer está sucediendo en México.

Se les tendría incluso que pagar un "sobrevalor" por sus tierras, porque en la mayoría de los casos se les expropian por utilidad pública o para hacer grandes negocios de los cuales nunca se benefician los campesinos. Sin embargo, cuando se lleva a cabo este mismo proceso con terratenientes a ellos sí se les paga el valor comercial y más, lo cual es injusto.

Sin duda, el problema no es la expropiación en sí, sino el "cómo" se hace. El decreto puede ser un acuerdo entre los campesinos, o bien uno que en los hechos representa una violación a sus derechos agrarios, dijo el especialista y también consultor.

La tierra tiene un valor de mercancía y a los campesinos no se les tiene por qué pagar un precio "social". Esta situación y otras violaciones indican que hay un grave atraso en el respeto a los derechos agrícolas en América Latina.

El campesino de la región ha sido catalogado como un ciudadano de tercera categoría, porque siempre se encuentra en una situación subordinada, no son sujetos en igualdad de derechos, están protegidos por el Estado, pero también con esto se les controla políticamente, apuntó Boainain.

Margarita Flores explicó que en México se ha dado un gran avance en el reconocimiento legal de los derechos de los campesinos, sobre todo por todo el amplio proceso de certificación de propiedades que se ha llevado a cabo; sin embargo, falta mucho para terminar el proceso.

La representante de la Cepal se manifestó a favor de potenciar empresarialmente al ejido, pues esta sería una forma de reconocer y defender los derechos agrarios y ponerlos en igualdad de circunstancias ante la propiedad privada.

Se puede ?dijo? potenciar la actividad empresarial para los ejidos, pues su característica "social" no quiere decir que no se puedan articular empresas de grupos campesinos. El reto es impulsar la formación de cuadros entre los ejidatarios, darles formación técnica, instruirlos en el conocimiento de los mercados y ampliar las inversiones.