JUEVES Ť 29 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť Rodolfo Stavenhagen

Posible, que se consulte a indígenas ante plan de Fox

CAROLINA GOMEZ MENA

La propuesta de reformar la ley de derechos y cultura indígenas hecha por el Ejecutivo durante su último viaje por Europa da la posibilidad de que en esta ocasión sí sean consultados los directamente involucrados; es decir, las comunidades indígenas, opinó Rodolfo Stavenhagen, relator especial de la ONU para los derechos humanos de los pueblos indígenas, quien deslizó que "el Congreso de la Unión tomó un poquito a la ligera" la auscultación a dicho sector, pues se limitó a realizar "foros" en lugar de hacer una consulta directa.

En entrevista con La Jornada, poco antes de la clausura del foro Evaluación e impacto del convenio 169 en México, Stavenhagen también dejó entrever que el hecho de no haber preguntado su opinión a los pueblos indígenas es el resultado de que en el país aún no se han definido las "prioridades".

Señaló que "hay que abrir un gran debate nacional sobre las prioridades, porque es evidente que algunas de ellas son el combate a la pobreza, al desempleo y la marginación, pero parece que hay algunos (funcionarios) que sienten que la prioridad es simplemente manipular las cifras financieras, lo cual puede ser muy importante, pero en una época de recesión y de crecimiento cero, y probablemente de bajo cero, hay que discutir las prioridades porque de por medio está el bienestar del pueblo y, desde luego, de los pueblos indígenas, los más pobres de los pobres".

Incongruencia

Sugirió que esta forma de aprobar una ley, sin consultarla, no es congruente con los cambios democráticos que se han dado en el país, y recordó que incluso cuando se decía que había plena democracia se preguntó a los pueblos indígenas su parecer sobre la "autonomía" y "los acuerdos de San Andrés".

Calificó de "curioso" que en esa época, "con el gobierno de Ernesto Zedillo, allá por el 95 se hizo una amplia consulta de los acuerdos de San Andrés, que duró varios meses y los resultados fueron hechos públicos, y se tomaron en cuenta, pero luego resulta que se discute la propuesta de reforma constitucional con base en los acuerdos de San Andrés y la ley Cocopa, pues ya no se hace una auténtica consulta, por eso los pueblos indígenas están en su justa razón de rechazarla".

Y es que para el relator es imperativo, puesto que México ratificó hace 10 años el Convenio 169 de la OIT, que no se haga caso omiso al artículo sexto de dicho convenio que establece claramente los procedimientos de consulta, los cuales deben ser abiertos y directos, no foros en los que sólo unos cuantos den su particular punto de vista, que puede no ser el de los involucrados.

Para Stavenhagen existe otro problema además de los procedimientos de consulta, el aspecto político, el cual mantiene roto el diálogo entre el EZLN y el gobierno, y es que aunque "el gobierno dice estar dispuesto a dialogar y hubo un manifiesto de un grupo grande de diputados que tienen la intención de mejorar la ley, lo que no se está considerando es el aspecto político de esta iniciativa que mandó el presidente (Vicente) Fox al Congreso, y que estaba inspirada en la llamada ley Cocopa".