MIERCOLES Ť 21 Ť NOVIEMBRE Ť 2001
Ť Sólo dos generales alcanzaron grado de divisionarios; en la Armada, ninguna promoción
Con mínimos ascensos para los altos mandos comenzó la restructuración de fuerzas armadas
JESUS ARANDA Y JUAN MANUEL VENEGAS
El proceso de restructuración de las fuerzas armadas, que inició con la actual administración, se reflejó en el número de ascensos concedidos a los altos mandos del Ejército, Fuerza Aérea y Armada, pues a diferencia de años anteriores el número de nuevos divisionarios y almirantes -en que era hasta de cinco-, esta vez sólo se concedió el grado de divisionario a dos generales, mientras que en la Armada no hubo un solo ascenso entre el almirantazgo, lo cual es inédito en la historia moderna del país.
Aun cuando el secretario de Marina, Marco Antonio Peyrot, hizo público desde el principio su interés por reducir la estructura de la Armada -lo que derivó en que la mitad de los almirantes, vicealmirantes y contralmirantes dejaran el servicio activo recientemente (de 247 que había al inicio de sexenio quedaron poco más de 120)-, había sectores en la Armada que dudaban que Peyrot cumpliera su compromiso de no proponerle al presidente Vicente Fox ningún ascenso de almirantes, en tanto no se adecua la institución a las nuevas circunstancias, en que los grados dependan del cargo, trascendió.
En cambio, el secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Clemente Vega García, le envió al Presidente un proyecto de restructuración del Ejército que no se ha hecho público, pero llama la atención que sólo dos generales hayan ascendido a divisionarios, cuando en los dos próximos años 18 de los 26 generales de división en activo pasarán al retiro por llegar a la edad límite.
Además se oficializó el ascenso a generales de división a Luis Pineda Orozco y Mario Pedro Juárez Navarrete -quien ayer mismo fue nombrado comandante de la 7 región militar con sede en Tuxtla Gutierrez, Chiapas-, de siete generales de brigada y 14 generales brigadier "de arma", es decir, con posibilidades de llegar en un futuro a ser secretarios de la Defensa o de ocupar la planilla principal del Ejército, en razón de que hay una regla no escrita que se ha respetado hasta la fecha, que sólo los divisionarios "de arma" llegan a ser titulares de la Defensa Nacional.
En esta ocasión ascendieron a general de brigada dos elementos de servicios y ocho más a generales brigadieres.
Por otra parte, en el marco del anuncio de los ascensos en el Ejército, Fuerza Aérea y Armada de México -que se da a conocer cada 20 de noviembre-, el presidente Fox, en su calidad de comandante supremo de las fuerzas armadas, impuso ayer condecoraciones de perseverancia a generales, pilotos y marinos de 10 a 45 años de servicio en una ceremonia que se realizó en el Patio de Honor del Palacio Nacional.
Entre los galardonados destacó el subsecretario de la Defensa, general de división Jesús Alvarez Pérez, por sus 45 años en la institución, quien por cierto fue el orador principal en el acto en el que reiteró la lealtad del Ejército a la institución presidencial, además de señalar que "el Ejército aspira no solamente a ser el guardián de la unidad, de la independencia y del honor del país, sino también a constituirse en escuela de virtud para quienes militan en sus filas".