Ť Ministro de Justicia duda de resultados de indagación
Reabren en Brasil la investigación sobre el embarazo de Gloria Trevi
DPA
Brasilia, 17 de noviembre. El nuevo ministro brasileño
de Justicia, Aloysio Nunes Ferreira, decidió reabrir la investigación
sobre el embarazo de la cantante mexicana Gloria Trevi, ante la denuncia
de que dos agentes federales mantuvieron relaciones sexuales con la artista
cuando estaba detenida en las dependencias de la Policía Federal
de Brasilia.
Según informa hoy el matutino Jornal do Brasil,
Nunes Ferreira recibió con escepticismo el informe final de las
investigaciones realizadas por la Policía Federal, que concluyó
que la artista se habría realizado una "autoinseminación
artificial" con una jeringa para quedar embarazada, en un intento de evitar
su extradición a México, donde es acusada de corrupción
de menores.
Las desconfianzas del ministro aumentaron después de que la revista semanal Istoe reveló, en su última edición, que los agentes federales Carlos José Santana y Marcos Bandera mantuvieron relaciones íntimas con la cantante, quien ahora está en el sexto mes de embarazo.
El informe conclusivo de las investigaciones internas realizadas por la Policía Federal fue enviado al jefe del Ministerio Público Federal, Geraldo Brindeiro, quien podrá ordenar nuevas verificaciones.
Al mismo tiempo, el Ministerio de Justicia rechazó un pedido de los abogados de Gloria Trevi, que buscaban aplazar la reunión del Consejo Nacional de Refugiados (Conare) que decidirá sobre el pedido de refugio en Brasil para la cantante, para su empresario, Sergio Andrade, y para su secretaria, María Raquenel Portillo.
La reunión decisiva se realizará el lunes, y se da como muy probable que sea negado el pedido de refugio, lo que abrirá camino para la extradición de Gloria Trevi a México, que ya ha sido autorizada por el Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil en diciembre del año pasado.
El culebrón en que se convirtió el proceso de extradición de Gloria Trevi, iniciado en enero del año pasado, cuando fue arrestada en Río de Janeiro, no terminará antes de febrero de 2002, después del nacimiento de su hijo brasileño.
Es que, aun cuando fracasen las maniobras de la defensa para evitar la extradición, las compañías aéreas no transportan pasajeras después del séptimo mes de embarazo.