DOMINGO Ť 18 Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť En 10 meses el PIB ha caído de 7 a cero por ciento y se perdieron 500 mil trabajos

Crecer un optimista 1.7% sería insuficiente para crear los empleos necesarios: Bendesky

Ť La nomenklatura financiera participó en redes de corrupción, afirma Fernández-Vega

ISRAEL RODRIGUEZ

El escenario para México en el futuro inmediato es muy complicado. Además, no hay en ninguna actitud política del actual gobierno acciones para restablecer las condiciones del mercado interno con más inversión pública y privada y así integrar las cadenas productivas. Las previsiones en el proyecto de Presupuesto de Egresos para 2002 son demasiado optimistas, y en caso de que verdaderamente se lograra un crecimiento económico de 1.7 por ciento será insuficiente para otorgar empleos a 1.2 millones de personas que se integran anualmente al mercado laboral.

''Vivimos una economía de psiquiatra'', ya que mientras en el exterior se presume de la fortaleza de México, se han perdido más de 500 mil empleos y en sólo 10 meses el PIB ha caído de casi 7 por ciento a cero. El déficit público propuesto de 0.65 por ciento en la realidad no será alcanzado pues integrando las deudas del IPAB y de los proyectos de inversión diferida, los requerimientos para pensiones y la deuda de los estados alcanzaría hasta 6 por ciento del PIB.

Estas fueron algunas de las conclusiones de la conferencia La recesión de la economía mexicana, los atentados terroristas en Estados Unidos y la nueva guerra, organizada por la Casa Lamm y el diario La Jornada, en la que participaron León Bendesky, Mario Rodarte y Carlos Fernández-Vega.

Bendesky Bronstein, director general de la consultoría en economía y política Sirem, indicó que la tendencia recesiva de México se estaba formando desde antes de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos.

Por primera vez desde hace 20 años se está sincronizando el ciclo económico recesivo en la economía mundial. Ahora Alemania va dejando de crecer pese a ser la economía más importante de Europa, y por lo tanto toda la zona de euro está creciendo mucho menos.

Japón va a tener una tasa de crecimiento negativa de 1.0 por ciento en este año. Hace diez años que no crece pese a que las tasas de interés son de cero por ciento, pero ni así se estimula el consumo y la inversión.

En una conferencia donde desapareció la solemnidad, Bendesky explicó que el escenario internacional bajó una vez más en los últimos dos meses la previsión de crecimiento de la economía mundial a 2.4 por ciento y así no hay motor externo que ''jale a la economía mexicana''.

El doctor en economía por la Universidad de Cornell señaló que el presupuesto del gobierno para 2002 está hecho con el criterio de que la economía estadunidense va a crecer 0.3 por ciento y la mexicana puede avanzar 1.7 por ciento y ''sabrá Dios cómo le van a hacer''.

''No hay motor que jale las exportaciones y no sabemos cómo vamos a crecer 1.7 por ciento si no hay mercado interno, no hay inversión y se está cayendo el consumo y las ventas se bajan mes a mes. Entonces esa cifra de crecimiento de Estados Unidos de 0.3 por ciento y de México de 1.7 por ciento realmente no entiendo de dónde salió''. A lo mejor, dijo en tono de sorna, ''consultaron a la Virgen de Guadalupe. Esa es la forma técnica en México de resolver las cosas. La milagrosa es creerle a Hacienda y la técnica es ir a La Villa''.

El mundo, con la sola excepción de México -según el gobierno-, está al borde de la primera recesión global en casi tres décadas. La Unión Europea conserva todavía un poquito de impulso más que Estados Unidos, pero la situación no le permite contrarrestar el impacto de la caída de esa potencia, y en Japón no hay crecimiento, señaló.

Muchos creen que esta guerra puede convertirse en un estímulo de la demanda. Esta guerra puede resolverse de manera rápida, pero no será una solución políticamente satisfactoria y no va a ser convincente en Estados Unidos, que busca venganza por el derribo de las Torres Gemelas, y sobre todo si no capturan a Osama Bin Laden o ''alguien que se le parezca, cuando menos''.

Del centro a la periferia

Ante un auditorio de 200 personas, León Bendesky indicó que antes la costumbre era que las perturbaciones venían de los países periféricos como el efecto tequila, samba, vodka o el efecto tango, pero esta es la primera vez en 20 años que las perturbaciones vienen del centro, de Estados Unidos, de Alemania, de Japón hacia la periferia, así que va llegar el rebote y esto se va poner ''padrísimo''.

''Me parece que todavía, a pesar del reconocimiento que hay en la propuesta del presupuesto sobre la fuerte desaceleración de la economía mexicana, las metas siguen siendo muy optimistas'', opinó.

Las tendencias para el año que entra, incluso si esta economía creciera 1.7 por ciento, son totalmente insuficientes porque la población está creciendo cuando menos a 2 por ciento. Entran al mercado de trabajo cada año un millón 200 mil personas a las que hay que dar empleo.

Incluso si pasara la reforma fiscal propuesta por Vicente Fox, no alcanzarían los recursos para financiar un presupuesto más alentador, porque se obtendrían recursos equivalentes a 2 por ciento del producto, que también es insuficiente. ''Entonces el chantaje también ya se agotó: de que si no pasan mi reforma fiscal la economía se cae. Esto no se va a caer. Mejor hagamos una buena reforma fiscal y no se calienten, pero también lo dudo porque nuestro Congreso es bastante ineficiente''. La verdad, añadió, es que el presupuesto está hecho como diciendo las cosas están mal, pero pueden estar peores.

El gobierno se encuentra paralizado y administra las cosas como si no estuviera pasando nada, cuando debería por lo menos estar poniendo en marcha un programa de emergencia, sostuvo.

Redes de corrupción y privatizaciones

Carlos Fernández-Vega, columnista financiero de La Jornada, rechazó tajantemente la propuesta de privatizar Pemex y la Comisión Federal de Electricidad, incluso si sólo se pensara en acabar con la corrupción en esas empresas estatales. Afirmó que las privatizaciones en México han sido poco exitosas como lo demuestran los casos de los bancos, las carreteras y los ingenios azucareros, entre otros, donde el gobierno ha tenido que rescatar a los mismos empresarios que participaron en las desincorporaciones.

Fernández-Vega aseguró que las privatizaciones han creado redes de corrupción en las que ha participado la llamada nomenklatura financiera, integrada por un grupo de empresarios coludidos con funcionarios públicos.

Sin embargo, reconoció que existe en México un grupo de empresarios que se la siguen jugando y están comprometidos con México y sufren los estragos de la recesión. Sin embargo, también hay otro grupo de empresarios que se han dedicado a financiar las campañas políticas y se les ha permitido realizar un reciclaje de fortunas. Mencionó el caso de Roberto Hernández, quien después de vender Banamex a Citigroup logró embolsarse más de 2 mil millones de dólares libres de impuestos y ahora pretende participar en la privatización de Pemex.

Mario Rodarte Esquivel, director general del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), afirmó que se están viviendo las consecuencias del ciclo recesivo mundial con caída de la producción y aumento del desempleo. Si bien no hay otros signos que digan que estamos en una situación de crisis, la situación empieza a ser preocupante, admitió.

Ante el auditorio preguntó: Ƒse puede hacer algo diferente? Sí se puede, respondió, pero es algo que no hemos hecho en los últimos 20 años. Entre los problemas graves destacan la baja educación, la escasa productividad de la mano de obra y la elevada concentración de la riqueza.

Asimismo, falta competitividad en diversos sectores de la economía y por ello insistió en avanzar en las reformas estructurales pendientes como la privatización de Pemex. Todo el auditorio reprobó esa propuesta.

El director del CEESP aseveró que una de las cosas más importantes es definir una política social diferente con mayor gasto en educación y salud, así como en infraestructura, para potenciar la capacidad productiva de México e impulsar el desarrollo.