JUEVES Ť Ť NOVIEMBRE Ť 2001

Ť Hasta el momento han efectuado tres reuniones privadas para impulsar el proyecto

En cónclave, funcionarios federales y estatales cierran filas en torno a la nueva terminal aérea

PATRICIA MUÑOZ Y ALONSO URRUTIA

Los gobiernos federal y del estado de México acordaron apoyos en educación, salud, desarrollo económico, vivienda y empleo a los habitantes de la zona de Texcoco que serán afectados por la expropiación de tierras para la construcción del nuevo aeropuerto.

La mayor parte del gabinete de Vicente Fox llevó a cabo tres reuniones entre martes y miércoles para apoyar la construcción de la nueva terminal aeroportuaria en Texcoco y acordar las primeras acciones. Como parte de sus conclusiones determinaron ''atender con gran sensibilidad y justicia los asuntos vinculados con el arraigo de estas familias a la tierra'' y establecer diversos apoyos inmediatos y de mediano y largo plazos.

Los acuerdos fueron tomados por los secretarios de Gobernación, Santiago Creel; de Comunicaciones y Transportes (SCT), Pedro Cerisola; de Desarrollo Social, Josefina Vázquez Mota; de Educación, Reyes Tamez Guerra; de Medio Ambiente, Víctor Lichtinger; de Salud, Julio Frenk, y de la Reforma Agraria, María Teresa Herrera Tello, así como el gobernador mexiquense, Arturo Montiel, y su gabinete.

En el encuentro se estableció una "ruta" de acciones a corto, mediano y largo plazos, así como una especie de cronograma de acciones para atender las demandas sociales, las cuales -aseguró el gobierno estatal- "ya se empezaron a recoger". Las primeras medidas que los funcionarios convinieron fueron: hacer un diagnóstico de los requerimientos en salud, educación y cuestión económica, así como de necesidades de generación de empleo, a fin de establecer una especie de política de apoyo integral para el desarrollo del área.

La Secretaría de Gobernación apuntó en este sentido "que no se trata de un programa de compensación" sino de una política de atención social, en un paquete de acciones colaterales a la construcción del aeropuerto.

Durante la reunión se abordó además el tema de las expropiaciones. No sólo se trató el asunto de las indemnizaciones de los terrenos ejidales, también la definición de criterios diferentes para hacer avalúos en aquellos terrenos donde ya existan construcciones.

Acordaron ''unir esfuerzos'' para fortalecer el proyecto del nuevo aeropuerto; por ello además de la respuesta social que se dará, comenzaron a indicar los requerimientos de infraestructura de la zona, en materia hidráulica y vialidades, así como "servicios de protección para el entorno ecológico".

La reunión se efectuó a puerta cerrada. No fue convocada la prensa, pese a que, paradójicamente, uno de los puntos prioritarios que señalaron es "reforzar los mecanismos de comunicación con la sociedad, para que los habitantes y vecinos de la zona cuenten con información y asesorías necesarias". Y fueron más allá, al sostener que "se concluyó que la garantía es que nadie se quede sin ser escuchado y atendido".