Ť Se resiste el ejército a cerrar sus puestos de vigilancia en el Ulster
Comienza Gran Bretaña a demoler varias de sus instalaciones militares en Irlanda del Norte
Ť Arrestan cerca de Belfast a dos supuestos disidentes del ERI que portaban ametralladoras
REUTERS, AP Y DPA
Belfast, 25 de octubre. Gran Bretaña comenzó hoy la demolición de varias de sus instalaciones militares en Irlanda del Norte y el gobierno de coalición de esa provincia au-tónoma británica reanudó sus funciones, en respuesta al anuncio de desarme del Ejército Republicano Irlandés (ERI).
Sin embargo, la amenaza de violencia en la conflictiva región seguía vigente después de que anoche fueron arrestados dos hombres con sendas ametralladoras en las afueras de Belfast.
Las autoridades dijeron que presumen que los individuos son republicanos disidentes que se oponen a la decisión del ERI anunciada el martes, tras tres décadas de lu-cha armada contra el gobierno británico.
Funcionarios de seguridad recordaron también que grupos paramilitares de línea dura y leales al gobierno británico aún están armados y activos.
"Es muy pronto para decir que la guerra ha terminado. Los republicanos disidentes, al igual que los grupos protestantes, continúan siendo una amenaza", dijo Ronnie Flanagan, jefe de la policía de la provincia, a la cadena de televisión BBC.
También la población se resiste a creer que el desarme del ERI garantizará la paz en la provincia.
"Cuando oí al principio la noticia estaba entusiasmada, pero cuando papá empezó a hablar y se tornó escéptico fue difícil mantener las esperanzas", comentó Diane Lo-wry, una protestante de 22 años.
Mientras la policía cerró algunas instalaciones en respuesta al cese del fuego declarado por el ERI en 1997, el ejército se resistió siquiera a cerrar uno de los más de una docena de puestos de vigilancia.
Pero este jueves un helicóptero del ejército llevó a un grupo de periodistas para que vieran cómo los trabajadores retiraban las planchas blindadas de un puesto de vigilancia frente a Camlough, bastión del grupo armado republicano.
En respuesta al anuncio del ERI, Londres anunció el pasado miércoles la demolición de cuatro fortificaciones militares, dos de ellas sobre colinas que vigilaban la región fronteriza de Armagh del Sur, de abrumadora mayoría católica.
Los trabajadores empezaron hoy a desmantelar una torre de observación militar que domina el centro del cercano Newtonhamilton, el único pueblo de Armagh del Sur con una minoría protestante pro británica significativa.
Aunque los protestantes manifestaron temores de que el grupo armado republicano aproveche la menor seguridad, los líderes católicos vieron los desmantelamientos como medidas menores y destacaron que la principal base amurallada y otra torre vigía siguen en pie.
"La gente quiere que el ejército británico se retire de aquí completamente y no que redecore sus bases", afirmó Ita Guibney, miembro de la Asociación de la Comunidad de Newtonhamilton.
John O'Neill, un católico moderado de 26 años, dijo que el desarme del ERI era una maniobra que no modificará el deterioro de las relaciones protestantes-católicas en mu-chos sectores.
"La cuestión es que el ERI estaba un poco alarmado porque la mayor parte de sus ingresos proviene de estadunidenses y después del ataque a las Torres Gemelas el mes pasado la gente allí estaba menos dispuesta a glorificar lo que el ERI hace, por eso tu-vieron que deshacerse de unas cuantas ar-mas por ahora", señaló.
Mientras tanto, en las edificaciones del gobierno en Belfast se reanudaron las ta-reas habituales cuando los tres ministros protestantes retornaron a los cargos que ha-bían abandonado la semana anterior por la negativa del ERI a deponer las armas.
La coalición de gobierno compartido en el Ulster entre protestantes pro británicos y los católicos del Sinn Fein (brazo político del ERI) en la provincia británica fue la pieza central de los acuerdos de paz del Viernes Santo de 1998.