SABADO Ť 20 Ť OCTUBRE Ť 2001

Golpe al proyecto foxista

Washington, 19 de octubre. La desaceleración del ritmo de crecimiento de la economía estadunidense, los atentados del 11 de septiembre y los ataques de Estados Unidos contra Afganistán afectaron duramente a la economía y sociedad mexicanas, que hasta hace muy poco disfrutaban de la bonanza del país vecino, dijeron analistas el viernes.

"México está seriamente afectado; tras los atentados nos dimos cuenta hasta qué punto la economía mexicana depende de la economía estadunidense", señaló Armand Pechard, director del Proyecto México del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS), con sede en Washington.

"Esto podría perjudicar seriamente al gobierno (del presidente mexicano Vicente Fox), porque con sólo un año en el poder quedará en evidencia que no podrá cumplir con la mayoría de sus promesas", estimó el analista.

El gobierno mexicano prevé para 2002 un modesto crecimiento económico de 1.7 por ciento, luego de un 2001 de estancamiento, lejano a las ambiciosas metas de 4.5 puntos que se manejaban hace menos de un año.

Carlos Hurtado, subsecretario de Hacienda, señaló el lunes ante los diputados que el producto interno bruto (PIB) crecerá este año 0.13 por ciento, muy lejos del 4.5 por ciento previsto oficialmente en enero, y sostuvo que 2001 cerrará con "gran pérdida de empleos".

"El gran problema de México es que 90 por ciento de sus exportaciones va hacia Estados Unidos", puntualizó Ramón Arocena, director del Departamento Latinoamericano del Instituto Internacional de Finanzas.

La caída del consumo en Estados Unidos redujo las exportaciones mexicanas destinadas a ese país.

Asimismo, el gobierno estimó que los ingresos por turismo caerán este año en unos 2 mil millones de dólares, dada la resistencia de los estadunidenses a viajar en avión; ya han comenzado a cancelarse reservaciones para diciembre. "Cancún, por ejemplo, es ahora un desierto, esto es muy deprimente", dijo Arocena.

Pese a este sombrío panorama, "el peso (mexicano) está muy fuerte porque todavía hay mucho dinero que viene a México", indicó el presidente del Grupo Financiero Citibank en México, Julio A. Quesada. "El problema es que éste es dinero golondrino, que se puede ir en cualquier momento", subrayó.

Otro problema para muchos mexicanos lo constituye la decisión de Estados Unidos -hasta ahora uno de los países más abiertos del mundo a la inmigración- de vigilar más estrictamente sus fronteras para prevenir nuevos actos de terrorismo en su territorio.

AFP