DOMINGO Ť 14 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Apremiante, la situación económica del organismo, señala Manuel Fuentes
Adeuda el STC-Metro 4 mil millones de pesos, revela subdirector de administración
Ť Carece de registro completo de bienes, lo cual limita la posibilidad de obtener créditos
ELIA BALTAZAR
La situación económica del Metro es apremiante. No sólo por las necesidades propias del sistema de transporte más importante de la ciudad, sino por una deuda heredada de la Federación, por 4 mil millones de pesos, así como el subsidio de un millón de pesos que otorga el gobierno capitalino para la operación de la Línea B en el estado de México.
Para el STC-Metro, como organismo público descentralizado, habría otras posibilidades de financiamiento además del presupuesto otorgado y los ingresos propios por el servicio y la publicidad, que próximamente se someterá a subasta, según instrucciones del jefe de Gobierno capitalino.
Pero sus posibilidades son restringidas debido a que el Metro no cuenta con un registro completo de sus bienes inmuebles y pasivos, que le permita respaldar sus peticiones, pues en la transferencia "automática" del servicio que se llevó a cabo luego de las elecciones de 1997, el gobierno federal no entregó a la administración capitalina la lista de propiedad debidamente regularizada y valuada.
Se sabe que el STC-Metro cuenta actualmente con 3 mil edificios y 4 mil 700 terrenos, de los cuales 2 mil ya están identificados. De éstos, mil 800 son propiedad del GDF y el resto del SCT.
Este es un proceso que apenas está en marcha, a cargo de la administración del STC-Metro. "Actualmente los despachos externos no han autorizado todavía que el STC pueda ser reconocido con todos los bienes bajo su propiedad, para que puedan ser efectivamente base de referencia para el financiamiento de otros recursos", explica el subdirector general de Administración y Finanzas, Manuel Fuentes.
Pese a esta limitación, dice el funcionario, el Metro tiene la situación específica de los créditos que está recibiendo por parte del GDF, el gobierno federal y otras vías. Por eso "tenemos la posibilidad de obtener algunos créditos, aunque con el aval del gobierno federal. Y así está ocurriendo actualmente.
"Estamos en el proceso de solicitar la compra de trenes nuevos, junto con la Secretaría de Finanzas y el gobierno federal, porque requerimos del aval de este último para toda operación de crédito".
Además, con la transmisión automática también "nos entregaron los problemas y una deuda de 4 mil millones de pesos, la cual fue contratada por la administración de Oscar Espinosa Villarreal y regencias anteriores. Y a pesar de que fue una deuda que asumió en el papel el gobierno federal, nos la dejó".
La deuda, explica el funcionario, fue contratada con diferentes bancos internacionales, a través de Banobras. Son pagos de entre 300 y 500 millones de pesos. "Pero este año hemos alcanzado acuerdos con algunos bancos para la reducción de intereses y ya logramos una quita de por lo menos 300 millones de pesos en el monto de intereses".
Manuel Fuentes considera que para satisfacer las necesidades del Metro se requiere de una participación metropolitana, en la que confluyan los esfuerzos del gobierno federal y el del estado de México.
Y explica: "En el consejo de administración tienen una silla con voz y voto un representante de Banrural y el secretario de Comunicaciones y Transportes, pero no recibimos de ellos alguna aportación. Ellos reconocen la necesidad de que pudiera haber una participación, pero no hemos recibido un compromiso".