DOMINGO Ť14 Ť OCTUBRE Ť 2001
Ť Documentados, 17 casos ante Naciones Unidas: ONG
Denuncian presiones de la CNDH contra familiares de desaparecidos
GUSTAVO CASTILLO GARCIA
Integrantes de organizaciones no gubernamentales, como la Fundación Diego Lucero y la Asociación de Familiares, Detenidos y Desaparecidos Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos en México (Afadem), presentaron más denuncias por desaparición forzada ante la Procuraduría General de la República (PGR), y aseguraron que, según sus registros, el número de casos ocurridos entre los años 70 y 80 asciende a más de 800.
En entrevista con La Jornada, Blanca Hernández y Julio Mata Montiel, líderes de esas organizaciones, respectivamente, denunciaron que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) "ha presionado a los familiares de algunos desaparecidos para que firmen una carta en la que se dice que ya no les interesa seguir buscando a su pariente y el caso se da por cerrado. De esto existen 17 casos documentados ante la ONU".
Aseguraron que en las denuncias presentadas ante la PGR "existen testimonios directos que involucran al general Arturo Acosta Chaparro Escapite en la realización de actos de tortura, privación ilegal de la libertad y desapariciones forzosas durante la etapa de la guerra sucia que el gobierno mexicano emprendió contra integrantes de todas las organizaciones armadas que surgieron en los años 70, particularmente en la zona de Guerrero".
Blanca Hernández señaló que se tiene documentado que personas que fueron beneficiadas con la ley de amnistía decretada en los años 70 para quienes participaron en movimientos insurgentes, posteriormente a su excarcelación fueron secuestradas y desaparecidas por agentes policiacos y militares en distintas partes del país.
Situación que se refleja en una de las nuevas denuncias formuladas ante la PGR. Es el caso de Roque Reyes García, quien permaneció encarcelado del 11 de septiembre de 1971 al 13 de septiembre de 1977, y luego fue amnistiado en septiembre de 1978; sin embargo, según los denunciantes, en julio de 1981, y luego de que durante varios días "individuos vestidos de civil vigilaran de manera ostensible" su domicilio, desapareció.
Su caso, señaló la presidenta de la Fundación Diego Lucero, "no es el único, ya que existen otros registrados, como los de Carlos Jiménez, Felipe Peñalosa y Antonio García, los cuales aún no han sido denunciados" ante la PGR para que se les integre a las investigaciones que lleva a cabo el Ministerio Público Federal.
Hasta el momento las denuncias presentadas ante la PGR ascienden a más de 300, y en ellas se hacen señalamientos en contra de los generales Acosta Chaparro y Francisco Quirós Hermosillo, dos de los principales personajes ligados a los grupos antiguerrilla que operaron para el gobierno federal en Guerrero, Jalisco y Chihuahua.
Julio Mata Montiel afirmó que "Acosta Chaparro era el jefe del Ejército que en los años 70, en la Sierra de Atoyac de Alvarez, operó el aniquilamiento de la guerrilla. Posteriormente lo hizo desde su cargo como jefe de la Policía Judicial del estado".
En torno a Francisco Quirós Hermosillo señala: "él empieza en Guerrero, pero posteriormente dirige lo que se llamó Brigada Blanca; estuvo en varias partes de la República, aunque se concentró más en los estados de Chihuahua, Jalisco y Sinaloa. Todo esto consta en las denuncias que los familiares hemos presentado ante la PGR".